Mauricio Pineda confesó que en el fútbol italiano se hacía el lesionado para no jugar por las coimas. El ex defensor de Colón y mundialista con la selección argentina dio los detalles de las maniobras de la mafia de las apuestas para arreglar los partidos. Y reconoció que este fue uno de los motivos que lo llevaron a perder el gusto por el fútbol.
“Fue difícil porque uno estaba acostumbrado en Argentina a los incentivos, que nunca lo vi como algo malo porque te motivaba para dar más y ganar. En cambio, en Italia, era para ir para atrás. A Juventus, después de ganar campeonatos, lo hicieron descender tres categorías por eso”, recordó el ex lateral que jugó en Udinese, en tres etapas, Napoli y Cagliari.
“Me pasó que el DT nos diga vamos para atrás o juguemos despacito. Hoy sería más difícil porque están los teléfonos y todo queda registrado. En ese momento, se sabía de las apuestas deportivas en Italia. Inglaterra, España y Alemania hasta la última fecha se podía apostar. Pero en el fútbol italiano cuando faltaban cuatro o cinco fechas la mitad de los partidos ya no estaban disponibles. Siempre estaba la duda y luego se descubrió”.
Y agregó: “No era poca plata. Todas estas cosas me fueron desilusionando en el fútbol. Al principio uno era mucho más inocente y lo que queríamos era disfrutar de jugar al fútbol. Aunque cobraba bien y tenía un buen pasar. Por eso no dejé de pensar que era un juego, pero estas te hacen dejar de quererlo tanto”.
“Era una locura, nos ofrecían mucha plata y nosotros nos estábamos jugando el ascenso. Era algo increíble lo que nos planteaban algunos. Decís la pucha, te matas jugando, entrenando y hay otros que están viendo todo el esfuerzo que se hizo durante un año por plata y adelante de tu público. Por esto llega un momento en que vos pensas que ya no es más un juego, es un negocio. Y ahí es donde hay cosas que no te terminan de gustar y me hicieron alejarme un poquito de todo”, continuó el ex defensor que llegó a jugar el Mundial de Francia 1998 con Argentina.
Sin embargo, para terminar aclaró que “el fútbol sigue siendo maravilloso y hay miles de historias y mucho más lindas”. Además, negó que esto haya marcado un antes y un después en su carrera. “No fue para nada un punto de inflexión. No dejé el fútbol por esto. Sí le fui perdiendo el cariño. Fueron un montón de cositas chiquititas que me fueron sacando esa pasión. Sinceramente ya había cumplido muchos sueños y metas en mi vida”.
Carrera profesional
Mauricio Pineda debutó en Huracán a los 18 años y permaneció en el club de Parque Patricios desde 1991 hasta 1996. Tras un breve paso por Boca (1996-1997), pegó el salto a Udinese (1997-1998). En 1999 jugó en Mallorca de España, para luego regresar a Udine por una temporada más. En el 2000 jugó en Napoli, pero retornó un año después a Udinese, para luego dar paso al último equipo italiano, el Cagliari (2002-2003). Su regreso a la Argentina lo hizo para jugar en Lanús (2003-2004) y se retiró en Colón de Santa Fe (2004). El ex defensor tiene en su haber la Intertoto con Udinese (2000) y la medalla de plata con la selección argentina en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996. Además, con la mayor disputó la Copa el Mundo de Francia 1998.