El jueves pasado el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, designó a Carlos Decotelli como flamante ministro de Educación de Brasil.
Tras la aparición de distintas irregularidades en el currículum, en el que aludía un doctorado realizado en la Universidad Nacional de Rosario, algo desmentido por la casa de estudios, finalmente renunció.
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Pero esa inconsistencia no fue la única en los antecedentes que presentó Decotelli.
La Universidad de Wuppertal, de Alemania, también negó que la empresa Krone le haya brindado apoyo para investigaciones posdoctorales como alegó el ahora ex ministro.
El hipotético doctorado de Decotelli que había realizado en la Universidad Nacional de Rosario lo negó el propio el rector Franco Bartolacci.
Nos vemos en la necesidad de aclarar que Carlos Alberto Decotelli da Silva no ha obtenido en @unroficial la titulación de Doctor que se menciona en esta comunicación. https://t.co/s4cipmc7Ur
— Franco Bartolacci (@fbartolacci) June 26, 2020
De todos modos, las inconsistencias del currículum de Decotelli no sólo eran de entidades extranjeras de Brasil.
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Las propias entidades del país carioca desmintieron al fallido ministro, porque la Fundación Getúlio Vargas también negó que el economista fuera profesor o investigador en la institución.
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Lo paradójico fue que pese a las contundentes demostraciones de falsificación académica, Bolsonaro quería mantener al funcionario en el cargo, pero debió ceder ante las presiones de su gabinete.