San Lorenzo tiene desde ayer una enferma de coronavirus que obligó de inmediato a detectar los posibles contactos. Es que se trata de una mujer, cuyo esposo también se encuentra contagiado, que daba clases de pilates y por lo que debieron ser aisladas 70 personas.
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La profesora de pilates es la mujer de un sindicalista de la Uocra que estaba trabajando en Bahía Blanca y viajó a San Lorenzo con un permiso de trabajador esencial. Esto a partir de su tarea gremial, para reencontrarse con la familia.
A los integrantes de la familia se les realizó el hisopado una vez conocido que el gremialista tenía coronavirus. El resultado le dio negativo a los dos hijos y a los padres del sindicalista. En cambio, arrojó positivo a la mujer.