El placer de comer algo dulce es algo común en, casi, cualquier persona. Y esto tiene una explicación: estimula la producción de dopamina, que produce bienestar. Sin embargo, el azúcar es uno de los principales causantes de obesidad y sobrepeso en todo el mundo y del desarrollo de enfermedades cardiovasculares vinculadas a su uso, como la diabetes.
"En el caso de las personas con diabetes, esto tiene mayor relevancia debido a que estos carbohidratos impactan directamente en la glucemia (azúcar en sangre) causando picos que a largo plazo pueden conducir a complicaciones crónicas. En este sentido, los edulcorantes no calóricos contribuyen a reducir el consumo de azúcar", explica la licenciada Cecilia Martinelli (M.N. 3.447), especialista en diabetes y obesidad.
Cuáles son
Los más utilizados en la Argentina son el aspartamo, la sacarina, el ciclamato, la sucralosa, el acesulfame K y los glicósidos de esteviol, conocida como estevia.
"Es importante resaltar que todos han pasado por un amplio proceso de evaluación de seguridad por parte de organismos internacionales y se ha concluido que son seguros para el consumo de adultos y niños a partir de los 3 años", señala la nutricionista.
La licenciada Martinelli compartió con el medio online Con Bienestar algunas de las características de los edulcorantes recomendados:
- Sucralosa: lo interesante de esta sustancia es que no puede absorberse en el intestino y por eso no produce pico de glucosa en sangre. Es apta para la cocción porque resiste las altas temperaturas y es uno de los edulcorantes que logra el sabor más parecido al del azúcar.
- Aspartamo: está formado por dos aminoácidos (componente estructural de las proteínas) y tiene un muy alto poder endulzante. No tiene efecto sobre la glucemia. Si bien es ideal para personas con diabetes, no resiste las altas temperaturas. No se lo recomienda para preparaciones que requieran cocción.
- Estevia: es una alternativa más apta para chicos y adultos con diabetes pero hay que tener cuidado porque el uso de hojas de estevia en crudo o el extracto de las mismas no son consideradas seguras y pueden contener sustancias potencialmente tóxicas.
- Sacarina y ciclamato: son los edulcorantes más antiguos. No tienen efecto sobre la glucosa en sangre pero algunas personas los rechazan debido a su resabio de sabor metálico. No se recomiendan en mujeres embarazadas debido a que pueden atravesar la placenta.
Fuente: Con Bienestar