Un equipo de investigadores del Conicet y de la Universidad de Swansea, en Reino Unido, revelaron que el cóndor andino puede cubrir distancias de más de 170 kilómetros durante más de 5 horas sin batir sus alas y para lograrlo, elige estratégicamente su ruta y forma de vuelo.
El grupo de investigadores estudió de manera intensiva y durante 10 días los movimientos de ocho jóvenes cóndores en la región de Bariloche y detectó que, tanto en la estepa como en las alturas, el cóndor recurre al aleteo solo en el 1 por ciento de su tiempo de vuelo.
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“Marcamos a los cóndores con unos dispositivos llamados daily diaries, que pueden medir la posición del ave hasta 40 veces por segundo y captar con precisión detalles de su comportamiento, tales como adónde va a tomar agua, dónde encontró alimento y cuánto aletea”, contó Sergio Lambertucci, director del Grupo de Investigaciones en Biología de la Conservación (Inibioma-Uncoma-Conicet.
Contabilizar las veces que estas aves baten sus alas en vuelo les permitió tomar dimensión del gasto energético real que tienen al desplazarse, teniendo en cuenta que, para especies como el cóndor andino, el costo de cada aleteo es 30 veces mayor que el de otros procesos metabólicos.
el cóndor recurre al aleteo solo en el 1 por ciento de su tiempo de vuelo.
Para lograr un vuelo “low cost”, los ejemplares de esta especie se valen de la energía que provee el medio ambiente. Viento, aire caliente. Sin embargo, lanzarse a planear a merced del clima y la geografía no es suficiente para un vuelo óptimo. Para los cóndores, el mayor problema a resolver son las condiciones del despegue, en el que invierten el 75 por ciento de sus aleteos.
“Esto sugiere que las decisiones sobre cuándo y dónde aterrizar son cruciales, ya que no solo los cóndores necesitan poder despegar nuevamente, sino que los aterrizajes innecesarios aumentarán significativamente sus costos generales de vuelo”, aseguró por su parte la investigadora Emily Shepard de la Universidad de Sweansea.
Fuente: Infobae