Una vez más, la Unión Tranviaria Automotor (UTA) de Rosario inició un paro de actividades en reclamo por salarios adeudados y como consecuencia del incumplimiento en el cobro del 50 por ciento del aguinaldo prometido. De esta manera, se rompió la tregua acordada con las empresas, la provincia y el municipio que logró la vuelta del servicio a las calles de la ciudad tras 29 días consecutivos sin servicio.
Las autoridades, sin embargo, confían en que la situación se normalizará en los próximos días luego de saldar las deudas con los trabajadores, en parte, por la sanción a la ampliación presupuestaria nacional que incluye un subsidio de 10.500 millones de pesos para el interior del país y, por otro, como consecuencia del compromiso firmado entre el ministro de Transporte de la Nación y la Cámara empresaria de transporte.
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Para este miércoles se espera una reunión entre los trabajadores en la sede local del sindicato de UTA en la cual definirán los pasos a seguir en caso que desde el Gobierno nacional sigan sin respuestas, teniendo en cuenta que los aportes del municipio y Provincia sí fueron adelantados.
“Sin pago del sueldo no hay paz social”, afirmó Sergio Copello, titular de UTA Rosario al explicar el quiebre del pacto acordada semanas atrás, que se había anunciado para los próximos tres meses. Después de la medida de fuerza de este martes analizarán los próximos pasos en el conflicto.