Si Independiente pone el pie en acelerador y viene decididamente a la carga por el delantero uruguayo, desde Arroyito estiman que llegarán a un acuerdo rápidamente. Claro que para eso la dirigencia de Avellaneda debe hablar primero con Central y después con Liverpool de Uruguay, club al que los canallas le adeudan dos de las tres cuotas pactadas (la tercera aún no venció) cuando el jugador llegó a Rosario.
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Según contó La Capital, hoy podría definirse un tema que fue motivo de charla durante todo el domingo entre los principales dirigentes de Central, quienes ya prácticamente tomaron la decisión de abrirle las puertas a Martínez.
Central en su momento acordó el préstamo del uruguayo a cambio de 750 mil dólares, monto con el que se quedaría con el 30 por ciento del pase del futbolista. Lo cierto es que la dirigencia canalla no pagó las dos primeras cuotas de ese acuerdo, lo que motivó que la dirigencia de Liverpool acudiera a la Fifa a reclamar la totalidad de la deuda. Ahora, Independiente pretende llevarse al delantero, por quien pondría alrededor de 800 mil dólares. En medio de esas negociaciones Central aspira a recibir un monto extra en caso de una futura venta.
En estos términos, el negocio es netamente económico para Central. Porque se evitaría de abonar los 750 mil dólares, a los que sin dudas en un tiempo les deberá agregar las costas correspondientes al juicio que Liverpool llevó a la casa madre del fútbol mundial.
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Desde lo deportivo está claro que no hay negocio, sobre todo por la buena impresión que dejó Martínez en los poquitos partidos que jugó con la camiseta canalla.