“La marcha se repite porque no sabemos qué va a pasar mañana”, sostuvo Patricia Bullrich. La titular del PRO estuvo en el masivo banderazo del sábado contra el Gobierno, en protesta contra medidas como el desplazamiento de jueces que investigan a Cristina Kirchner y la quita de fondos a la Ciudad.
La dirigente se sumó a la marcha desde su auto y con tapabocas, después de recuperarse de COVID-19. Planteó que a seis meses del comienzo del aislamiento por coronavirus “no se cuidó la salud ni la economía ni la libertad y se avanzó con una agenda de monopolio y control de la Justicia” y que existe “incertidumbre en la población”.
Señaló que hay una sensación de que no se sabe “qué va a pasar mañana, qué va a hacer el Gobierno mañana”, y que por eso vuelve a haber manifestaciones contra el gobierno de Alberto Fernández en medio de la cuarentena.
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Consideró que el Gobierno “en vez de abrirse y escuchar se ha cerrado cada vez más” y criticó que en estos meses “no se cuidó la salud, la economía ni la libertad”. Respaldó las protestas y dijo que hay “un movimiento popular fuerte que defiende valores como el mérito, el trabajo, la producción”, afirmó.
Cuestionó a la vicepresidenta Cristina Kirchner, que dijo que “parece tener la suma de la agenda y la suma del poder público”. Además planteó que ella “puso un Presidente y ahora conduce a un Presidente que está licuado de poder”. Consideró que Cristina Kirchner “sigue su agenda obsesivamente que es liberarse de culpa y cargo de sus cargos de corrupción y avanza en esto con sistematicidad”.
Además la vinculó con el recorte de fondos de coparticipación al gobierno porteño que dispuso Nación. Bullrich acusó a la vicepresidenta de “avanza en una venganza hacia los sectores que votaron a Juntos por el Cambio”, en relación a la Ciudad, gobernada por uno de los referentes del espacio de la oposición, Horacio Rodríguez Larreta.
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La titular del PRO consideró además que la realidad “desvaloriza la palabra del Presidente, que en campaña se había mostrado moderado y que en el Gobierno es un talibán”. Cuestionó que en problemáticas como la toma de terrenos “todos los ministros dicen cosas distintas” y que hay “un vacío en políticas de seguridad, lo que genera miedo”.
Bullrich defendió las protestas, ya que dijo que la gente “sale a defender la propiedad privada, como en el caso de la empresa Vicentin”, que el Gobierno trató de expropiar, "o cuando se toman sus propiedades y terrenos y es el país del vale todo”. Habló de “una fuerza social que defiende valores como el mérito, el trabajo, la producción, que ve que sus ingresos se les licuan en las manos”.