El presente de Emelec no es el mejor de los últimos tiempos y ahora tendrá que jugar por Copa Sudamericana ante Unión. El jueves enfrentará al Tatengue en Argentina.
Por el momento, el entrenador español Ismael Rescalvo no piensa en presentar su renuncia a la directiva de Emelec, más bien dijo que se enfocará en seguir trabajando para sacar a sus dirigidos del mal momento futbolístico y calmar las críticas de los hinchas.
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Según contó El Universo de Ecuador, durante la rueda de prensa virtual por YouTube, tras el empate a 0 ante Macará, el técnico fue consultado por periodistas si ha analizado dar un paso al costado y, en un tono pasivo, respondió: “Yo me dedico a trabajar, a sacar a mi equipo adelante y obtener el máximo rendimiento en cada partido. El encuentro de hoy lo pudimos haber ganado, así como el de la semana pasada (pero cayó de visita 1-0 ante Guayaquil City)”.
“Hoy las sensaciones fueron buenas, porque fuimos superiores al rival y vamos a seguir en esa búsqueda (para conseguir las victorias)”, agregó.
Mientras que los seguidores del bombillo escribían en la sección de comentarios de YouTube que renuncie al club. Las críticas sobre el adiestrador se desataron luego de finalizar la primera etapa, en las que de 45 puntos (de 15 que se disputaron) solo pudo conseguir 16, y finalizó en el undécimo lugar. Ahora, en tres duelos de la segunda fase solo ha sumado 4 unidades, de 9 posibles (en tres choques).
Sobre el choque ante Macará, Rescalvo volvió referirse sobre la táctica y las oportunidades que sus dirigidos elaboraron, pero no lograron transformar en gol. Un discurso repetido que también molesta a la afición azul, porque no se puntualiza en los verdaderos problemas como la falta de una identidad de jugo.
“El primer tiempo, se dio según lo establecido, el rival se vino a defender a intentar romper el ritmo del partido (...). Tuvimos tres chances en la primera parte para poder abrir el marcador, que no pudimos concretar. Tuvimos un dominio importante y en algunas situaciones no faltó profundizar los pases para atacar por las espaldas de los laterales”.
“En la segunda parte nos faltó un juego más elaborado (...), intentamos acumular más gente por dentro para buscar espacios entre líneas para llegar al área del portero rival. En defensa estuvimos bien, más allá de la mala salida que tuvimos y el rival trató de aprovechar para marcar. Lástimas que no marcamos de entrada para haber tenido un partido más abierto”, añadió.
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Pero los problemas de los eléctricos, según los analistas deportivos o sus hinchas son de fondo, porque a los jugadores -en especial a los que trabajan por las bandas y centro de la cancha- les cuesta levantar centros, armar con pases las llegadas o pisar el área del arquero rival; y, por ello, los aficionados piden salida del DT.
