La investigación comenzó cuando agentes del Comando Radioeléctrico, que patrullaban por las calles de la barriada, advirtieron movimientos sospechosos de parte de un Peugeot 307, color gris plata, con tres individuos a bordo.
La intriga de los oficiales nació porque el citado vehículo ya había sido visto momentos antes en la zona. Para acabar con las dudas los actuantes decidieron interceptar el coche en Regis Martinez y Gdor. Freyre, esto es, en cercanías del club Gimnasia y Esgrima.
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Ni bien los policías se acercaron surgió el primer sobresalto. Es que los tres ocupantes del rodado estaban vestidos con ropa identificatoria de la empresa Urbafe. Una vez que descendieron del auto, se procedió al chequeo dando resultado negativo en cuanto a elementos de peligrosidad.
No obstante luego se procedió a verificar el interior del coche. Fue entonces cuando se descubrió que en el asiento trasero había una mochila donde se guardaba un arma de fuego. Según se supo se trató de una pistola, calibre 11.25, la que tenía un cartucho en recámara. Además había dos cargadores, cada uno de los cuales contenía 5 cartuchos.
Quien estaba al mando del vehículo (un hombre de 30 años) dijo ser el dueño de la mochila, agregando que el arma de fuego también era suya.
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Así las cosas los tres hombres fueron trasladados a la seccional 9na. (interviene por jurisdicción) donde se comunicó todo lo ocurrido al fiscal en turno, quien dispuso que al sujeto de 30 años, se le inicie causa por “Portación indebida de arma de guerra”. En tanto a sus otros dos acompañantes (un hombre de 41 años y otro de 25) se los trasladó en calidad de “Demorados”, según indicó El Litoral.