El intendente de la ciudad de Santa Fe, Emilio Jatón, confirmó que el municipio endurecerá los controles de seguridad durante la madrugada del primero de enero, luego que la capital provincial evidenciara un gran número de fiestas clandestinas, tanto en Navidad como durante todo el fin de semana.
Desde el Centro de Especialidades Médicas de Santa Fe (CEMAFE), uno de los cincos puntos de vacunación contra el COVID-19, el mandatario se mostró preocupado por el comportamiento ciudadano, por lo que aseguró que, "este fin de semana, y en las fiestas, vamos a tomar medidas totalmente diferentes a lo que hicimos el 24”.
Entre las medidas anunciadas, Jatón enumeró doblar el importe de las multas a quienes realicen fiestas clandestinas, la incorporación de la Municipalidad en el proceso judicial denunciando tanto a los organizadores de las fiestas como a los dueños de los domicilios, como así también, mayores controles de alcoholemia en puntos claves de la ciudad.
El intendente recordó que, del mismo modo a lo sucedido en Navidad, no estarán habilitados los paradores de la costanera, mientras que no cortarán espacios públicos tradicionales para la circulación de las personas, a fin de desalentar conglomeraciones.
“Todavía no encontramos un piso, pero si un techo” que fue el 27 de octubre cuando se registró una máxima de 371 casos. “Es un momento clave para poder frenar esa segunda pandemia” afirmó el mandatario.
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