Daiana Ruscitti es vecina de Jorge Balla, condenado por crímenes de lesa humanidad y, actualmente, bajo prisión domiciliaria. Desde hace varios meses, su familia sufre el calvario de tener como vecino a un represor.
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En diálogo con CADENA OH!, expresó lo que implica vivir cerca de este sujeto. "Es una situación muy complicada, grave y con mi marido no la estamos pasando bien", aseguró Ruscitti y agregó: "hace más de dos meses y medio nos animamos a denunciar a este hombre, pero hasta el momento no tuvimos ninguna respuesta".
"Vivimos con ciertos cuidados y tenemos que estar atentos a cada cosa que hacemos. Tuvimos que cambiar nuestra rutina de vida y, de hecho, hay con un custodio en la puerta; esto es un calvario", precisó Daiana.
Según detalló la mujer, "fueron amenazados de muerte y tuvieron agresiones físicas" y añadió: "a pesar de tener prisión domiciliaria, salió de su casa, agredió a mi marido y le dijo que lo iba a matar".
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"No podemos disfrutar de nuestro hijo porque tenemos que vivir esta situación y no nos dan respuestas", se lamentó la mujer. No obstante, destacó el acompañamiento por parte del Gobierno provincial, más precisamente de la Secretaría de Derechos Humanos, en torno a un programa de salud mental.
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