Al término de su mensaje anual en el Concejo Municipal de Reconquista, el intendente Amadeo Vallejos se puso de pie, saludó al presidente del cuerpo, quien estaba sentado a su lado y emprendió el retiro.
Mientras eso ocurría, Eduardo Paoletti, le avisó que tenía para entregarle copias de las minutas de comunicación que no fueron contestadas por el Departamento Ejecutivo, y le recordó que el año pasado aprobaron una ordenanza que sanciona a los funcionarios que no responden. Luego se agachó para sacar "los regalos", y puso sobre la mesa una jeringa, recomendándole "que sea bien usada", una crema de cannabis; "y una plantita que no es una azalea", aclaró irónicamente.
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Finalmente agradeció a todos y le pidió a la concejal Natalia Capparelli para que pase a bajar la bandera. Fin del acto que marcó oficialmente la apertura del período de sesiones "ordinarias" del Concejo Municipal de Reconquista.
Los "regalos" de Paoletti quedaron sobre su mesa. El intendente sólo llevó los pedidos de informes que reclama el Concejo, entre ellos, información de composición de la TGI, sobre el personal, pauta oficial y organigrama municipal.