El jefe de Estado sostuvo que "las leyes se hacen para ser cumplidas", por lo que espetó: "A los que no les gustan, que recurran a la Justicia".
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"A mí, la rebelión no. En un Estado de derecho las leyes se cumplen. No estoy para tolerar la indisciplina de muchos restaurantes colmados de gente", afirmó el Presidente. Además, señaló que "seguirá asistiendo" a los comercios gastronómicos que resulten afectados económicamente por las restricciones que, por el momento, rigen hasta el 30 de abril.
"El que esté en desacuerdo, que vaya a la Justicia y consiga que un juez diga que lo que hice está mal", insistió el mandatario nacional y añadió: "Estoy para ayudarlos en la emergencia en las que estamos viviendo, pero no estoy para tolerarlos que hagan lo que quieran; la indisciplina que he visto en muchos restaurantes colmando de gente".
Fernández se expresó luego de la reunión a solas que mantuvo con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en medio de una tensión extrema, ya que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) irá a la Corte Suprema para rechazar la suspensión de las clases.
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A pesar de la resistencia del dirigente de Juntos por el Cambio, el jefe de Estado ratificó sus medidas; en particular, la decisión de suspender las clases presenciales hasta el próximo 30 de abril en la zona metropolitana.