En el departamento San Justo, la pandemia no da tregua. Recientemente fue incluido como zona roja por su alto nivel de contagios. En 15 días se reportaron más de 100 casos y unos 20 diarios en la cabecera departamental, cifra elevada para una población cercana a los 40.000 habitantes.
Epidemiólogos afirmaron que, de seguir con estos índices, los efectores deberán reabastecerse de oxígeno medicinal cada dos días, cuando la reposición normal se realiza semanalmente.
Debido a la creciente cantidad de contagios en los últimos días, se dispuso la ampliación de camas con la incorporación de ocho nuevas unidades, que, sin embargo, rápidamente fueron ocupadas.
Mientras ayer debió derivarse a más pacientes hacia la capital provincial ante la imposibilidad de atención, el nivel de positividad en muchas localidades del departamento se posiciona como muy alto.
"La situación es muy compleja y con dos realidades, una durante el día con gran cantidad de movimiento y otra durante la noche, con un cierto acatamiento a las medidas, pero con hartazgo social en cuanto a las restricciones", dijo a Sin Mordaza el senador departamental, Rodrigo Borla.
"Estamos pidiendo un último esfuerzo y un equilibrio en la vacunación", agregó el legislador, quien sostuvo que allí, el plan de inoculación de la población objetivo, muestra diferencias en relación a otras zonas de la provincia.
En tanto, se iniciaron gestiones junto al Samco y a la Universidad de Rosario para conseguir cinco respiradores Covid, junto a tres cascos de oxígeno. Esto podría usarse en caso que no se puedan derivar pacientes a Santa Fe, teniendo una terapia intermedia a disposición en San Justo.
Sumado a esto, se manifestaron inconvenientes con el traslado y movilidad de los pacientes por la falta de ambulancias de alta complejidad, unidades necesarias para mantener estables a los enfermos que requieran atención intensiva urgente.
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