La unidad de obstetricia y ginecología en la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, publicó un estudio donde asegura que una embarazada podrá saber con exactitud la fecha en que dará a luz. De esta manera, se evitaría la ansiedad de las últimas semanas, además de poder detectar si el parto será prematuro.
Un embarazo, en promedio, dura cuarenta semanas. Es por ello que se estima que la fecha de nacimiento ocurrirá en algún punto entre la semana 37 y 42.
“El cuerpo y la fisiología de la madre comienzan a cambiar unas tres semanas antes del inicio real del trabajo de parto. No es un solo cambio, existe esta preparación por la que el cuerpo tiene que pasar”, asegura Virginia Winn coautora del estudio y profesora asociada de obstetricia y ginecología en la Universidad de Stanford.
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Luego, añadió Andrew Shennan, profesor de obstetricia en el King’s College de Londres, agregó que “este análisis de sangre evitaría la necesidad de exámenes cervicales invasivos para predecir el trabajo de parto, que a menudo se utilizan cerca del nacimiento, y también puede ayudar a predecir el parto prematuro”.
Con este análisis, se podrá precisar la fecha de parto de dos a cinco semanas antes que ocurra. En estos periodos, el cuerpo atraviesa fuertes cambios hormonales.
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En las semanas anteriores a dar a luz, se registra un aumento de las hormonas y una reducción en la formación de células sanguíneas. Además, células inmunitarias y proteínas comienzan a interactuar de forma diferente.
Por el momento, las pruebas se realizaron sobre un universo de 63 mujeres embarazadas. Las fechas de partos se pudieron predecir con 17 días de anticipación, aunque consideran que con un estudio mayor el periodo podría extenderse.
Fuente: Ambito