El Gobierno de la provincia de Santa Fe dispuso una serie de medidas de asistencia a las empresas afectadas por las restricciones dispuestas para mitigar la segunda ola de coronavirus, que entre transferencias directas y eximición de tributos llega a unos $ 3.000 millones.
En el caso de las ayudas en dinero, la administración de Omar Perotti volverá a asistir a los 30 sectores que tuvieron el beneficio hasta abril y sumará otros, como los casos de la gastronomía, la hotelería y las empresas de transporte turístico.
El ministro de Economía de la provincia, Walter Agosto, informó que las medidas se aplicarán en junio, julio y agosto, período tras el cual se realizará una evaluación para medir el impacto que tenga en ese momento la pandemia en las actividades que reciben esa asistencia.
Leer también: El detalle de la ayuda que brindará el Gobierno a empresas afectadas
El cálculo oficial indica que las erogaciones que deberá realizar la provincia alcanzan alrededor de $ 1.400 millones.
La segunda parte del plan de ayuda a las empresas refiere a medidas tributarias, que se implementarán a través de eximiciones en el pago de impuestos, la prórroga de la moratoria actualmente en vigencia y un plan especial de pago para deudas impositivas generadas en el transcurso de la pandemia.
Estarán eximidos de pagar el Impuesto a los Ingresos Brutos los bares, restaurantes, hoteles y alojamientos, salones de eventos y servicios relacionados, canchas de futbol 5 y otros complejos deportivos, jardines maternales y centros de atención de desarrollo infantil.
Leer también: El urgente pedido de los movimientos sociales al Gobierno provincial
La medida también abarca a los servicios relacionados al turismo, salas de teatro, de eventos culturales y complejos cinematográficos, discotecas y gimnasios.
Entre otros beneficios, los eximirán del pago de cuotas 2 y 3 del Impuesto Inmobiliario, debiendo acreditar cuando no sean propietarios que tienen a su cargo el pago de dicho impuesto.
Las medidas adoptadas en materia de eximición del pago de impuestos implicarán una menor recaudación para la provincia estimada en $ 1.600 millones, lo que sumado al monto de las asistencias totaliza un monto de $ 3.000 millones.