El organismo también recomendó quitar la resina cannábica de ese grupo, donde figura desde 1961.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió esta semana retirar esa sustancia de la lista de drogas peligrosas que data de 1961.

El tratamiento con resina, o aceite, de cannabis resultó positivo en pacientes con ataques de epilepsia o dolor crónico. Entre otras afecciones que hasta ahora se tratan con psicofármacos tradicionales.

Desde la OMS respaldaron así un estudio que finalizó en noviembre de 2018. Y que podría modificar la lista IV, la categoría más estricta contemplada en el Tratado de la Convención Única sobre Estupefacientes de 1961.