Para entender la situación es necesario hacer un poco de historia. La FM 95.5 de Tostado era propiedad del Dr. Carlos Venancio Iruretagoyena, abogado y pastor evangélico, quien se conectó en diciembre el 2017 con Cadena Oh! para retrasmitir la señal de la radio santafesina.
En julio 2019 la radio tostadense se vendió a Emir Viotti, quien mantuvo la señal de Cadena Oh! durante un tiempo hasta que optó por realizar un acuerdo con Aire de Santa Fe. Para sorpresa de los oyentes, de un día para otro, dejaron de escuchar a Hugo Isaak y apareció Luis Mino. Fue una secisión comercial de la FM 95.5. En su momento, no se responsabilizó a nadie. Es el juego de la actividad privada.
En función del nuevo escenario, Cadena Oh! solicitó la adjudicación de una frecuencia al Enacom con la intención de reponer la señal en la ciudad cabecera del departamento 9 de Julio.
Llegó la licencia para FM 98.5 y una propuesta
Simultáneamente que el Enacom otorgaba a Cadena Oh! la licencia para una emisora de FM en la ciudad de Tostado, el titular de la FM 95.5 le ofreció a Cadena Oh! retornar con la señal a su emisora luego de evaluar la programación actual y el sistema de automatización que le permite incorporar pautas locales.
Cadena Oh! aceptó la oferta y, de un día para el otro, salió Luis Mino y entró Marcelo Garrido al aire de la mañana de Tostado. Decisión comercial. Similar a la anterior.
Es decir que, si bien Cadena Oh! estaba autorizada a emitir desde su propia frecuencia, aceptó el ofrecimiento de la FM 95.5 para reiniciar de inmediato, a través de esa emisora, sus transmisiones en la ciudad de Tostado.
Intento de politizar la cuestión
En la FM 95.5 participaba el periodista Miguel Ángel Rosales, quien después de la humillante derrota en las PASO (sólo obtuvo 171 votos), quedándose afuera del Concejo Municipal y sin futuro cierto, intentó politizar una decisión comercial buscando un escándalo provincial sin sustento real. Además, en la maniobra involucró a un conocido dirigente de la política.
En el mismo sentido, para victimizarse y conseguir el apoyo de la FM anterior, decidió no seguir con su espacio en la emisora local y buscar apoyo capitalino.
En definitiva, la falsa versión expresada a través del conductor de Aire de Santa Fe por los datos aportados por este colega tostadense, dejó a la emisora de la capital provincial al límite de un juicio por calumnias e injurias.