Apesar del gran momento profesional y de cambio personal que atraviesa Federico Bal y de su intento por alejarse del escándalo, sigue siendo blanco de críticas. El actor realizó un profundo descargo en la red.
Durante la última entrega de los premios Estrella de Mar, Julieta Bal abucheó al elenco de Nuevamente Juntos, obra que protagonizan su papá y su hermano, por no asistir a la gala y recibir su premio a Mejor Revista. En diálogo con Intrusos, Federico se mostró angustiado por las palabras y la actitud de su hermana y remarcó que su papá, Santiago Bal, realiza la obra con mucho esfuerzo. Además, contó que tras enterarse del abucheo de Julieta, le mandó un mensaje y luego la bloqueó de WhatsApp.
“No lo llores cuando no esté, si no supiste respetarlo en vida”, contó Fede que le dijo a su hermana.
El miércoles, Mica Viciconte, compañera de Federico en Nuevamente Juntos, mostró en Incorrectas el resto del mensaje que el actor le mandó a su hermana luego de que ésta dijera que él le mandó un mensaje violento.
"A mí hay cosas que ya no me sorprenden en la vida. Pero tu falta de respeto ni hacia mí, ni mi laburo, sino a tu papá, es tan desagradable. Solo espero que no te haya tomado la cámara. Un asco todo", dice el resto del mensaje.
Este jueves, tras el escándalo, Federico realizó un fuerte descargo, aunque aseguró que "todo es un aprendizaje".
A través de su cuenta de Instagram, el actor y director expresó: "En los últimos 3 años me pasaron miles de cosas. Tuve la enorme bendición de que la mayoría de ellas fueron maravillosas. Hacer una película con mi viejo, que me llamen para protagonizar una segunda, trabajar en el programa más importantes de estos tiempos y ahora poder dirigir a mi mamá y a mi papá en un espectáculo que vivo cada noche como un regalo de la vida. El público nos acompaña. Se ríen, se emocionan en cada función", dijo.
Y siguió, refiriéndose a las constantes críticas que recibe: "Parece que todo es ideal y en un punto lo es. Pero nada es gratis. Cuando mejor te va, más te cuesta. Las críticas se multiplican. Y casi no hay un día en el que no digan 'Fede estuvo mal porque...'. No culpo, ni estoy criticando a nadie. Ni me victimizo, ni nada de eso. Solo digo que parece que la cosa funciona así".
"El éxito, o como quieran llamarlo, viene acompañado de asperezas y espinas. Y uno tiene que entender que no es lo mismo tener éxito en el trabajo, que ser feliz. Tengo que agradecer cada día el poder trabajar de lo que quiero. Y agradecer más aún estar viviendo este presente, día a día, con mis viejos. Subiendo al escenario juntos. En una especie de sueño perfecto", remarcó.
Por último, dijo: "Tengo que entender que tal vez el costo de todo esto sean esas espinas, que lastiman pero no matan. Todo es aprendizaje y todo me hace más fuerte", concluyó Fede.