Ante el incremento inusitado del narcotráfico en la región, el juez federal de Reconquista, Dr. Aldo Alurralde, exhortó a la propia sociedad a generar “anticuerpos” contra el flagelo de las drogas e insistió en que el Estado debe poner el tema “en agenda”, según declaró en una entrevista realizada con el periodista Toti Díaz.
¿Qué tipo de espacios cree Usted que hay que crear para evitar los consumos problemáticos?
Los espacios deben ser de prevención, la gente tiene que saber el daño que produce el consumo de estupefacientes, además no es gratis para la salud y a eso lo puede explicar mucho mejor un médico, pero también lo pueden explicar aquellos que han pasado por ese calvario que implica las adicciones. De todos modos, nosotros no actuamos sobre quien consume sino con quien comercia la droga, a veces coincide el consumidor con la venta. El consumidor tiene que tener un tratamiento con los efectores de salud por eso deben existir más instituciones que traten al consumidor.
Y como ciudadanos ¿qué podemos hacer para colaborar?
Como ciudadano no hay que asumir una actitud pasiva o indiferente hacia el narcotráfico, es decir, muchas veces nosotros nos encontramos con que se llega con la medida del allanamiento, los vecinos del barrio manifiestan que sabían que ahí se vendía droga, pero ninguno hizo una denuncia, aunque sea anónima. Hoy por hoy hay muchos mecanismos conservando el anonimato, hay que quitarse el miedo, tenemos que mantener una ciudad y una zona que no sea amigable con el narcotráfico porque el narcotráfico se instala en los lugares donde hay desidia por parte de las autoridades públicas, funcionarios políticos y judiciales. El narcotráfico se instala donde hay mínimo reproche social o desatención social y es una cuestión que no la va a solucionar un juez o un fiscal, sino que debe haber un trabajo conjunto donde tiene que estar incorporada la sociedad. Hay que generar anticuerpos contra el narcotráfico, desde la propia sociedad.
El Estado ¿qué rol debe jugar ante esta problemática?
En primer lugar, debe priorizar en su agenda este tema de las adicciones porque, si no, esta misma cuestión comienza a desbordar y llega a afectar hasta a la propia política. Esto lo hemos visto y lo ha manifestado el propio presidente de la Corte Suprema al señalar que es la gran problemática que va a enfrentar a futuro la Argentina. Es un tema que en algún momento tiene que calar en las autoridades políticas y marcar una agenda y una verdadera política de Estado.