Hablar de sexo es, indefectiblemente, remitirse al placer. Sin embargo, más allá de esta asociación inmediata, el sexo puede generar otros numerosos beneficios. En el caso de la mujer, pueden mencionarse la prevención de disfunciones sexuales, el alivio de los síntomas de la menopausia y la reducción del riesgo de hipertensión, entre otros.
1- Previene y trata las disfunciones sexuales
Las disfunciones sexuales (trastornos del deseo, de la excitación, del orgasmo o del dolor) son muy frecuentes. Tanto hombres como mujeres sufren disfunciones sexuales, aunque las mujeres sufren una mayor patologización de sus dificultades en la cama; en vez de centrarse en buscar formas de que las mujeres vivan con mayor libertad su sexualidad y la disfruten más, se asume que es “normal” que tengan “problemas sexuales”, como si estuviese en su naturaleza el disfrutar menos del sexo.
Además, rápidamente se coloca la etiqueta de “anorgasmia”, “dispareunia” o “deseo sexual hipoactivo”, en vez de asumir que muchas relaciones sexuales están basadas en el placer del hombre, y no tanto en el de la mujer.
Las personas que se masturban tienen significativamente más orgasmos con la pareja, mayor deseo sexual, mayor autoestima, mayor satisfacción marital y sexual y requieren menos tiempo para excitarse.
2- Aumenta la libido y el deseo
Cuanto más se practica la actividad sexual, más alto se vuelve el deseo y la libido en general. En la actualidad el deseo sexual bajo es uno de los problemas más frecuentes en consultas psicológicas y médicas.
Según Ana Lombardía, experta en salud y bienestar sexual de la marca Womanizer, este es un problema común en mujeres: por lo general, ellas suelen tener mucha mayor carga mental en su vida diaria, lo que suele hacer que el sexo quede relegado a un segundo plano y el deseo sexual aparezca con menos frecuencia.
Además, en las relaciones heterosexuales las prácticas muchas veces van dirigidas hacia el placer del hombre, lo que puede hacer que estos encuentros sean menos placenteros para ella y, por tanto, las ganas de repetir sean menores. A veces, incluir el uso de juguetes vibradores en la pareja hace que las mujeres disfruten más y que el encuentro sexual esté enfocado también en el placer de ellas.
3- Alivia los síntomas de la menopausia
Durante la menopausia el nivel de estrógenos disminuye significativamente, por lo que muchas mujeres sufren de sequedad, irritación, dolor en la vagina y paredes vaginales más delgadas.
El sexo en solitario y la masturbación aumentan el flujo sanguíneo en la zona genital y pélvica. Y el flujo sanguíneo en esta zona aumenta la lubricación vaginal y disminuye potencialmente el dolor.
Además, puede ser psicológicamente útil para aumentar la autoestima y recuperar el placer (ya que la sociedad ha llegado a retratar a las mujeres mayores como poco sexuales o asexuales).
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4- Alivia el insomnio
Un estudio llevado a cabo en 2019 descubrió que las personas que tenían orgasmos experimentaban "resultados de sueño favorables", como dormirse más rápido u obtener un sueño de mejor calidad.
Los orgasmos en pareja se asociaron con estados de sueño favorables y los orgasmos logrados a través de la masturbación se asociaron con una mejor calidad y latencia del sueño.
En la comparación de sexos, 8 de cada 10 hombres suele reportar que el coito los induce a la relajación y al sueño. En el caso de las mujeres, solo el 45% lo afirma.
Esta diferencia puede explicarse por la diferencia en la liberación de hormonas; mientras que en los hombres disminuyen la adrenalina y la noradrenalina y aumentan la oxitocina y la prolactina al alcanzar el orgasmo, todas estas hormonas aumentan en el cuerpo femenino. Como la adrenalina es importante para el estado de alerta y la concentración, las mujeres tienden a sentirse menos cansadas.
5- Método para curar el vaginismo
Se cree que el vaginismo es una de las disfunciones sexuales femeninas más frecuentes. Se trata de una condición de dolor vaginal en la que los espasmos involuntarios de los músculos pélvicos hacen que las relaciones sexuales con penetración sean extremadamente dolorosas o imposibles.
Los dilatadores vaginales son a menudo una de las herramientas y tratamientos recomendados para el vaginismo. La terapia con dilatadores puede ir acompañada de la estimulación (del clítoris) con vibradores, estos ayudan a que los músculos se relajen y el placer puede ayudar a anular gradualmente las asociaciones mentales de la paciente entre el sexo y el dolor.
6- Favorece la salud cardiovascular y reduce del riesgo de hipertensión
Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la primera causa de muerte en el mundo y se calcula que se cobran 17,5 millones de vidas al año (dato de 2020). La presión arterial elevada es una enfermedad grave que aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardíacas y cerebrales, y es una de las principales causas de muerte prematura en todo el mundo. La presión arterial alta ejerce presión sobre los vasos sanguíneos, lo que provoca daños y arterias estrechas y endurecidas.
En 2016 investigadores de la Universidad de Chicago y Michigan descubrieron que las mujeres que practican la sexualidad en pareja tienen una mejor salud cardiovascular y un menor riesgo de hipertensión. Los resultados sugieren la frecuencia y calidad sexual parece proteger a las mujeres del riesgo cardiovascular.
7- Previene las infecciones cervicales y del tracto urinario
Las infecciones del tracto urinario (ITU) son las infecciones ambulatorias más comunes, con una incidencia a lo largo de la vida del 50-60% en mujeres adultas. La actividad sexual es un importante factor de riesgo de riesgo.
La masturbación puede eliminar bacterias que han podido quedar adheridas al cuello uterino, lo que disminuye las posibilidades de desarrollar una infección cervical o del tracto urinario.
8- Fortalece el suelo pélvico
Una de cada tres mujeres sufre trastornos del suelo pélvico. Entre estos se incluye la incontinencia urinaria que, además de ser una disfunción física, tiene efectos psicológicos como la pérdida de autoestima, la falta de confianza o los problemas de pareja.
Un suelo pélvico fuerte es importante para prevenir la incontinencia urinaria, pero además se asocia a una mayor frecuencia de actividad sexual, así como a una mayor respuesta orgásmica, es decir, a conseguir orgasmos más largos e intensos.
9- Mejora la memoria
La relación entre la cognición y la actividad sexual en adultos sanos está poco investigada. Una cantidad limitada de investigaciones en esta área ha mostrado que la actividad sexual está asociada con una mejor cognición.
Un estudio de 2016 mostró que las mujeres de entre 50 y 90 años tenían mejor memoria o más recuerdos del pasado, a mayor actividad sexual. En 2017, unos investigadores evaluaron la memoria de un grupo de mujeres heterosexuales utilizando palabras abstractas y caras humanas. Las que tuvieron más sexo obtuvieron mejores resultados en las tareas que involucraban el hipocampo (la parte del cerebro que se ocupa del aprendizaje y las emociones).
10- Reduce los síntomas de la depresión y el estrés
La depresión es una enfermedad que se diagnostica a más mujeres que hombres. La oxitocina se libera después del orgasmo, lo que puede contribuir a aliviar los síntomas de la depresión. Ésta está implicada en funciones neuropsiquiátricas y puede ser un factor importante en múltiples trastornos psiquiátricos, como los trastornos del estado de ánimo y la ansiedad.
El estrés es otro de los fenómenos más extendidos en la sociedad moderna. A menudo empeora los síntomas de otros problemas físicos y niveles de exposición prolongados pueden provocar enfermedades mentales. Las relaciones sexuales y la masturbación pueden hacer que la presión arterial sea menos reactiva al estrés y reducir sus niveles generales, informó Clarín.
