Tras el segundo ataque consecutivo a una sucursal del Banco de Santa Fe en Granadero Baigorria, el Ministerio de Seguridad de la provincia dispuso asignar los recursos necesarios en las 200 entidades de la ciudad de Rosario.

"Si ya tuvimos dos ataques a dos bancos en dos días consecutivos, ayer a primera hora orienté al Jefe de la policía de la provincia asignar los recursos necesarios para las recorridas preventivas teniendo como objetivo los 200 bancos de la ciudad de Rosario", aseguró el ministro de Seguridad, Claudio Brilloni.

La balacera a una sucursal del Banco de Santa Fe en Granadero Baigorria, una localidad del Gran Rosario, donde dejaron una nota intimidatoria para el diputado provincial Maximiliano Pullaro, también exministro de Seguridad y precandidato a la gobernación, quedó registrada en las cámaras de la sede de la entidad financiera. En esas grabaciones puede notarse la tranquilidad con que los delincuentes disparan 19 veces contra el edificio y luego se dan a la fuga.

En las imágenes se observa cómo cerca de las 23 del martes dos personas llegan en moto al Banco de Santa Fe ubicado en la esquina de las calles Rivadavia y Chacabuco, a solo una cuadra de la seccional 24° de la Policía. Quien maneja, de casco, detiene la marcha; y su acompañante, con gorro y parte de la cara tapada con una bufanda, se baja y corre hacia la sede del banco.

 

A continuación, en los videos tomados desde dentro de la sucursal, se ve cómo primero el delincuente ingresa para chequear que no haya personas en el interior y luego arroja algo, que se presumen serían las notas intimidatorias: una con la amenaza a Pullaro, que pedía “dejá de hablar de los narcos, si todos sabemos que vos y tu hermano son narcos”; y otra vinculada al intento de fuga del líder Esteban Alvarado, quien buscaba irse en helicóptero de la cárcel de Ezeiza, pero la operación fue frustrada por la Justicia federal.

Después, el tirador se coloca afuera y empieza a efectuar los disparos. Antes de retirarse, tira de nuevo y corre para volver a subirse a la moto y escapar. En total fueron 19 impactos: nueve sobre el vidrio externo, dos en el de la puerta de ingreso, tres en la pared y cinco en el techo. En el lugar se secuestraron 11 vainas servidas calibre 9 milímetros, ocho trozos de latón y cuatro de plomo, enviados a peritar.