Jimena Barón se encuentra en Asia, donde participó de Por el Mundo, junto con Marley y Mirko, pero gracias al internet y la globalización, las últimas noticias que conciernen a la farándula le generaron un fuerte malestar.

Marcelo Tinelli, mandamás del Showmatch y el Súper Bailando 2019 tiene en mente una jugada que fastidió a la intérprete de La Cobra, que decidió cruzar al conductor sin temor a alguna represalia.

Tinelli manifestó en Twitter sus ganas de convocar a Daniel Osvaldo, ex de Jimena y padre de su hijo, Morrison, para que se sume al certamen de baile, tras conocer que el ex futbolista devenido en músico de rock pasó a las finales de Bailado con las estrellas en Italia, país para el cual jugó en su selección de fútbol y se desempeñó en varios equipos.

El conductor informó que cuando apenas termine en la competición transmitida por el canal RAI, lo quiere ensayando en los estudios de La Corte. “¡¡¡¡Lo queremos en el #SuperBailando2019 apenas termine en Italia!!!!”, escribió en la red social del pajarito.

La reacción de Barón fue solo una imagen, con la que defenestró a Marcelo recordándole su paso por el certamen durante el año pasado, y cómo combatió contra el machismo desde su programa

“Hace seis meses”, escribió la Jimena, junto con la foto de su performance en el ritmo libre dedicado al movimiento “Ni una Menos”, y otra imagen de un abrazo entre ellos dos.

Es de conocimiento popular que la relación entre Osvaldo y Barón no terminó bien, y la actriz y cantante ha narrado en infinidad de ocasiones las malas experiencias que vivió con el papá de su hijo por culpa de su machismo y celos.

Para colmo, el periodista Ángel de Brito ya echó leña al fuego con una contundente frase en sus redes sociales. “La cobra se enojó con el cuervo...”, disparó, en referencia a la popular canción de la morocha y el fanatismo del conductor por San Lorenzo de Almagro, club en el cual ejerce su función de Vicepresidente.

Por el momento, Marcelo no le respondió a la ex participante de su certamen, pero ha quedado claro que la buena relación entre ambos está a un paso de romperse.