La situación se da en un edificio de Francia al 200 y se debatirá tras las vacaciones en la comisión de Planeamiento del Concejo.

Un pedido de excepción por parte de un desarrollador que construyó tres departamentos de más y montó un quincho en una altura ilegal en el centro de manzana generó una polémica en el Concejo Municipal. La misma, tendrá nuevos capítulos tras el receso invernal.

La torre está en Francia al 200 y ante la irregularidad se solicitó al cuerpo deliberativo la autorización a la transgresión para poder escriturar los inmuebles. Ahora, los ediles deberán decidir si ordenan demoler lo que se hizo de más, aceptan la solicitud o bien, como planteó el bloque Ciudad Futura, que un departamento se convierta en refugio para las víctimas de violencia de género.

Expediente

El expediente se presentó en la última sesión ordinaria previa a las vacaciones bajo el número 240.472-R-17. En el mismo, Carlos Ariel Rossi solicitó la aprobación por excepción de ampliación sin final de obra en Francia 262/264.

Un permiso del 2007 que provocó un debate entre las bancas del Concejo. "El expediente viola la normativa vigente, pero hacemos una propuesta de modificación. La donación a favor de una de las unidades destinada a dar techo a las víctimas de violencia de género y violencia urbana", sorprendió la edila de Ciudad Futura, Caren Tepp a sus pares.

Propuesta

La legisladora prosiguió: "Ante los abusos vienen y nos dicen que no se pueden echar atrás. Tengamos una postura inteligente en política de vivienda. Como Estado debemos dar una puntapié contra los empresarios que se hacen los vivos. Frente a las excepciones debemos presentar propuestas claras".

La oficialista María Eugenia Schmuck, el macrista Roy López Molina, la peronista Fernanda Gigliani y la propia Tepp avalaron la vuelta a comisión de Planeamiento para su análisis. Esto incluirá la propuesta de Ciudad Futura.

"Uno de los constructores a los que se le demolió un piso entero (en alusión al edificio frente al distrito Centro, en calle Wheelwright) se debe sentir un estúpido porque el Concejo vota cualquier tipo de excepción", consideró Gigliani. E indicó que la demolición resulta "una conducta ejemplificadora, por lo que estoy segura que los empresarios acatarían a futuro".

Dúplex y quincho

El concejal Carlos Cardozo, integrante de la comisión de Planeamiento, aportó información al expediente. "El pedido de edificación se hizo en 2007 para un edificio de viviendas de planta baja y 11 pisos, más un dúplex ocupando parcialmente el 12º y 13º nivel", comentó y detalló que se edificó "excediendo lo autorizado originalmente". Por ende, el permiso se encuentra abierto sin final de obras, pero actualmente el edificio se encuentra terminado y habitado.

Ahora, se solicita al Concejo registrar lo construido por fuera del permiso de edificación original, con modificaciones internas; el agregado de una nueva unidad de dúplex de dos niveles en la terraza y un quincho volcado al fondo de la parcela, en el primer piso sobre la cubierta de las cocheras.

"Ciertamente, el dúplex se sitúa muy por encima de los 13 metros de altura permitida por la reglamentación actualmente en vigencia en el área, en tanto que el quincho supera los seis metros de alto permitido por el centro de manzana", puntualizó Cardozo.

Transgresores

"El 80 por ciento de los expedientes que trata la comisión de Planeamiento son para regularizar obras o proyectos que transgreden el reglamento de edificación o el Código Urbano. Es decir, para regularizar construcciones que se hicieron por fuera de la norma buscando una ventaja económica sobre el resto que cumple con la ley (invaden una calle o retiros de jardín, ocupan el centro de manzana, se construyen más pisos, más metros)", repasó Tepp.

"Todo eso funciona con la lógica del hecho consumado, busco una excepción y una ventaja económica. Son conscientes de que transgreden la ley, pero como saben que difícilmente el Estado lo mande a demoler, pagan una multa irrisoria. Proponemos que quien transgredió tenga que donar al Estado una de las viviendas", indicó.

En el mapa urbano de la ciudad hay situaciones heterogéneas en torno a lo construido.

En 2010, la Justicia condenó a la empresa constructora de las torres Victoria Río, en Wheelwright al 1400, y al arquitecto de la obra a resarcir con 520 mil pesos a los dueños de una casa lindera por haber invadido con pilotes subterráneos la propiedad vecina sin autorización de sus propietarios.

En 2007, los realizadores fueron obligados a demoler 148 metros cuadrados que no habían sido autorizados.

Varios concejales admitieron que éste fue el único caso frente a otros anteriores y posteriores. Como lo que se legisló en diciembre pasado por parte del Palacio Vasallo, al autorizarle una excepción a un edificio ubicado en la zona de Sarmiento e Ituzaingó.

El proyecto ingresó con un plano de cocheras que tenían 5 metros de altura. Sin embargo, se montó una losa y se construyeron 5 departamentos de un ambiente. Finalmente, obtuvieron el okey del Concejo.