La medianoche del 24 de octubre de 2018, los investigadores hallaron en una vivienda de Francia al 1100, en el sur de la ciudad dos cuerpos tirados en el piso y en estado de descomposición. Una piedra, un cuchillo y dos televisores encendidos.
A más de nueves meses, todavía no se pudo establecer cómo murieron Rafael Espino (62) y Rita Mónica Rampazzo (57). Como si fuera poco, el hijo del matrimonio, Rodrigo Espino, (que padecía parálisis cerebral) fue encontrado en su habitación con pocos signos de vida y falleció con posterioridad en el hospital José María Cullen.
Mientras se esperan resultados de estudios patológicos que podrían ser claves para saber cómo murieron, este lunes el gobierno provincial publicó en su boletín oficial una recompensa por 500 mil pesos para quien aporte datos a la causa, algo que había solicitado la querella.