La Comisión Episcopal de Pastoral Social lo solicitó al gobierno nacional ante el "severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado del precio de los alimentos de la canasta básica".

La Comisión Episcopal de Pastoral Social solicitó al Gobierno nacional que declare "en forma urgente" la emergencia alimentaria y nutricional, ante el "severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado del precio de los alimentos de la canasta básica".

"Si bien el Estado Nacional está asistiendo con mayor ayuda alimentaria, no sería suficiente para paliar las deficiencias de este tiempo, por ello solicitamos se dispongan las medidas necesarias para declarar la emergencia alimentaria y nutricional en todo nuestro país de modo que se puedan cumplir sin demoras metas como las propuestas", indica un comunicado de la comisión que preside el obispo Jorge Lugones.

La declaración de la emergencia alimentaria es un reclamo que viene sosteniendo en los últimos días el candidato presidencial de Consenso Federal, Roberto Lavagna, así como organizaciones sociales como Barrios de Pie y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), entre otros.

En el comunicado conocido esta mañana se recuerda que al concluir la Semana Social, que se realizó a fines de junio en Mar del Plata, los obispos que integran la Pastoral Social se expresaban "conmovidos al advertir que el grado de desigualdad social en que estamos sumergidos es muy grande y peligrosísimo para nuestro país".

"En estos meses, adicionalmente, advertimos que, ante el severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado del precio de los alimentos de la canasta básica, nos encontramos en una situación de emergencia alimentaria y nutricional, que afecta esencialmente a los más vulnerables, en especial a los pequeños", advirtieron en el texto.

La preocupación por el tema alimentario y nutricional de los sectores más vulnerables había sido uno de los temas principales abordados en la reunión que el presidente Mauricio Macri mantuvo esta semana con la cúpula de la Iglesia en la Casa de Gobierno, donde se analizó la situación social y económica tras las PASO del 11 de agosto.

En ese marco, la Pastoral Social consideró hoy que es "urgente implementar una Canasta Básica de Primera Infancia con productos esenciales que puedan ser distribuidos gratuitamente y/o a costo subsidiado para garantizar la seguridad alimentaria y nutricional, la salud, y los cuidados de calidad de niñas y niños", que incluya medicamentos, vitaminas, leche líquida y en polvo fortificada, productos lácteos, carnes, pescados, frutas, verduras, huevos, legumbres, y pañales.

Para los obispos que integran la comisión también es "urgente aumentar el presupuesto destinado a los comedores y a las huertas escolares, comunitarias y familiares, y a emprendimientos de la agricultura familiar y social, garantizando la equidad y la calidad federal de los servicios de asistencia alimentaria y nutricional".

En el comunicado, la comisión episcopal cita al papa Francisco, quien "nos recuerda que la fraternidad es el principal fundamento de la solidaridad y que se necesitan también políticas eficaces que promuevan ese principio de la fraternidad, asegurando a las personas –iguales en su dignidad y en sus derechos fundamentales– el acceso a los bienes de modo que todos tengan la oportunidad de desarrollarse plenamente como personas".

Por último, alentaron a las comunidades eclesiales y a Cáritas, "a ser artesanos de fraternidad y solidaridad, bajo la protección de la Virgen de Luján, Madre de nuestro pueblo, porque -como dice la canción Jesús Eucaristía- no es posible morirse de hambre en la Patria bendita del pan".