En Somos Familia se contó la historia de la familia de Adriana y Patricia que, tras fracasar en un intento de fertilización asistida, decidieron probar con una “inseminación casera”.

¿De qué se trata este método? ¿Es peligroso?

Para responder a estas y otras preguntas, ConBienestar entrevistó al ginecólogo y experto en medicina reproductiva, el doctor Fernando Neuspiller (MN 82815).

“Si se hace bien, es seguro”, destacó el especialista. “En casos como el de Adriana y Patricia, un hombre deposita en un frasquito su muestra de semen, y luego las chicas con ayuda de una jeringa y una cánula, lo introducen en la vagina de la mujer, el día antes de la ovulación”, detalló.

Riesgos

Sin embargo, el doctor advirtió de los riesgos de fallar en la técnica. “En caso que la muestra se deposite dentro del útero, se puede producir un shock tóxico. Es clave depositarlo correctamente en la vagina”, profundizó Neuspiller.

“Un procedimiento bien realizado y con los controles o resguardos pertinentes de inseminación casera tiene las mismas tasas de gestación que una relación sexual: 20% por ciclo, por intento”, ejemplificó.

Los médicos están para resguardar el proceso. En esto hizo hincapié el ginecólogo al recordar que cuando todo este procedimiento se realiza en una clínica o asistido por profesionales, hay pautas de seguridad con las que el paciente puede contar. En caso de hacerlo de manera privada, hay que ser prudente: “Asegurarse de que todas las personas intervinientes están sanas, con los exámenes pertinentes que confirmen el estado de cada uno”.

Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva

Este medio se comunicó asimismo con las autoridades de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (SAMER), pero descartaron brindar una opinión sobre la inseminación casera por “no ser un tema científico”.