A casi tres semanas del crimen frente a la disco Le Brique de Villa Gesell, continúa la investigación por la muerte de Fernando Báez Sosa. En el último tiempo se tomó conocimiento de la conversación que mantuvieron los amigos del joven esa noche. Pero además, se instruyeron siete cuerpos de expediente con 1.400 fojas, se tomaron más de 20 declaraciones testimoniales y hubo cuatro jornadas de ruedas de reconocimiento.

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De acuerdo al testimonio de los amigos de la víctima, el problema empezó por un hecho menor dentro de la discoteca. En sus declaraciones, contaron que J., uno de los amigos de Fernando, tropezó con uno de los jóvenes de Zárate y en ese incidente volcó el líquido del trago que llevaba en un vaso sobre la camisa de uno de los rugbiers.

“Salimos porque lo sacaron a Fer”, escribió en dos mensajes, una conversación que figura en el expediente. Posteriormente, En medio de la brutal agresión, J. alertó de lo sucedido en el grupo mientras escapaba de los rugbiers. “Nos están cagando a piñas”. Sus amigos pensaron que se trataba de una broma: “Jajaja callate”, “Jajaja son unos idiotas”, escribieron incrédulos. “En serio”, les insistió J.

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Luego en el grupo de WhatsApp habló R. Les pidió a los demás que “salgan todos, los que quedan” y, tras un audio, puso en mayúsculas: “Salgan que Fer está inconsciente”.

En total fueron diez los dispositivos estudiados. Los análisis a los celulares (a todo su contenido: fotos, videos, transcripciones de chats) fueron hechos por la División de Operaciones Técnicas de la Agencia Regional de la Policía Federal, cuyo laboratorio se encuentra en la ciudad de Mar del Plata.