Cuando en mayo Donald Trump determinó que las tecnológicas estadounidenses no colaboren con fabricantes chinos, y en consecuencia Google anunció que los teléfonos de Huawei no accederían a las actualizaciones de Android; el fabricante chino reveló que tenía un as bajo la manga.

Esa carta es HongMeng, un sistema operativo en el que Huawei trabajó por años. Ejecutivos de alto rango aseguraron que ese software será hasta un 60% más veloz que Android. La escena móvil se preparaba para recibir una nueva alternativa, una propuesta diferente al dominante sistema de Google y a iOS de Apple.

Pero ahora, una representante de la marca china puso un freno a ese escenario. “Seguiremos usando Android”, dijo Catherine Chen, vicepresidente senior de Huawei y miembro de la mesa directiva de la compañía. Lo hizo en declaraciones a la prensa en un encuentro celebrado en Bruselas, Bélgica, según publica la agencia oficial del gobierno chino, Xinhua.

Por qué dieron marcha atrás

Entre el veto de Estados Unidos (y de empresas de aquel país, entre ellas Google) y las declaraciones de Chen ocurrió un hecho relevante: la tregua entre Estados Unidos y China, tras el anuncio realizado por el propio Trump luego de la cumbre del G20 celebrada recientemente en Osaka, Japón.

“Las compañías de EE.UU. pueden vender equipos a Huawei, donde no hay problemas importantes con la seguridad nacional”, dijo el republicano.

En este contexto, la ejecutiva de la firma asiática no negó la existencia de HongMeng: sería ridículo hacerlo, después de que representantes de la compañía lo promocionen con bombos y platillos cuando una barrera los separaba de Android.

Chen dijo que el S.O. que crearon no será una alternativa a Android, y que está pensado para uso industrial y no para smartphones.

Entre las posibilidades que se barajan, la más aceptada es que HongMeng será un software destinado a wearables y televisores. El propio CEO de la empresa lo había comentado ante empresarios, mencionando también otros productos, como tablets e incluso automóviles.

HongMeng también es una muestra de poder y de no dependencia. Es la declaración de que si bien Android es importante para Huawei, aquel no es el único camino para que esa compañía continúe en su línea ascendente dentro del negocio móvil, que ya lo tiene como el segundo mayor vendedor de smartphones a nivel mundial.