Se trata de las unidades construidas en barrio Olímpico y que serán sorteadas en agosto. Hay cada vez más interesados en anotarse.

La demanda es muy alta. Casi 30 mil personas se inscribieron para acceder a las 500 viviendas del barrio Olímpico, en la zona norte, que la Secretaría de Hábitat santafesina sorteará en agosto. Se trata de uno de los tres planes federales a los que Santa Fe ingresó en los últimos cuatro años, donde el gobierno nacional aporta el 70 por ciento del costo de las unidades y la provincia el resto, además de los terrenos y la infraestructura. En cuatro años, la demanda casi se duplicó pasando de 17 mil familias inscriptas a las 29 mil actuales. La confianza en el sistema de sorteo, pero sobre todo, la imposibilidad de obtener un crédito o un plan Procrear disparó la demanda, consideró el secretario de Hábitat, Diego Leone.

El funcionario provincial recalcó Santa Fe tuvo “sólo tres proyectos de viviendas” durante la gestión del presidente Mauricio Macri y habló de “la falta de políticas sostenidas por parte de la Nación en los últimos años y el reparto discrecional de los fondos para este fin”.

Unidades

Estas unidades —que forman parte de un proyecto global de 640— se suman a otras 630 unidades sorteadas en Rosario y 64 en Rafaela en los últimos cuatro años, lo que Leone consideró “poco” antes de agregar que “el 70 por ciento de los fondos de las unidades los aporta la Nación, en tanto, la provincia financia el 30 por ciento restante, además de los terrenos y la infraestructura. Eso redunda en el 50 por ciento cada uno”.

Se trata de un proyecto de 600 millones de pesos, aunque por los efectos de la inflación, el funcionario estimó que ese número ascenderá a los 800 millones, que, sumado a los terrenos aportados por la provincia, llega a los mil millones de pesos.

Las viviendas fueron levantadas en el barrio Olímpico, en la zona norte de la ciudad, y serán sorteadas a través de la Lotería de Santa Fe los próximos 27, 28 y 29 de agosto en diferentes categorías: demanda general (310), fuerzas de seguridad provinciales (100), antigüedad (35), discapacidad motriz (25), otra discapacidad (25) y bomberos voluntarios y ex combatientes de Malvinas (5).

Fin de julio   

Para eso, las familias interesadas se inscriben exclusivamente hasta fin de mes a través de internet en el Registro Digital de Acceso a la Vivienda, que está disponible en www.santafe.gov.ar/habitat. Los anotados deben cumplimentar una serie de requisitos, que incluye ser mayor de 18 años, no ser propietarios de inmuebles y residir o trabajar desde hace al menos dos años en Rosario, además de conformar un grupo familiar, ser padre o madre con hijos, hermanos o abuelos con nietos. El monto mínimo de ingresos mensuales está estipulado en 12.500 pesos y el máximo en 50.000 mil, que deben demostrarse a través de salario, monotributo, ingresos autónomos, jubilación, pensión, Asignación Universal por Hijo, u otros subsidios.

Que haya casi 30 mil aspirantes a acceder a una casa para Leone no hace más que demostrar que “no se está pudiendo alcanzar la demanda”. Así, señaló que esa lista de aspirantes se duplicó en los últimos cuatro años. “Venimos creciendo en el valor absoluto de nuestro presupuesto y creemos que hay que hacer viviendas, pero también otras cosas”, recalcó el funcionario, y detalló que de los fondos de la Secretaría de Hábitat “un 60 por ciento va a mejoramiento y un 40 a viviendas; apenas un 10 por ciento del dinero que ingresa son recursos extraordinarios”.

Escasez de fondos nacionales

Con ese marco y la escasez de fondos nacionales, “Santa Fe aporta fondos en la medida que puede con el presupuesto provincial”, dijo además de criticar “la discrecionalidad en el reparto de los fondos nacionales y la falta de una política sostenida en el tiempo”.

Para el funcionario, la digitalización y la inscripción en un registro único no sólo vino a evitar las largas colas y la inscripción manual ante cada sorteo, sino que además otorgó “credibilidad y transparencia” al sistema, aparte de ser una “base de datos valiosísima a la hora de tomar decisiones”.

Sin embargo, admitió que el mayor crecimiento de la demanda se da porque “los créditos, ya sea UVA o Procrear, para un trabajador medio resultan inaccesibles; no puede pagar una cuota que hoy en promedio se lleva entre el 25 y el 35 por ciento del salario”.

En el caso este proyecto, se trata de cuotas que representan un 20 por ciento del salario del grupo familiar y que resultan en planes de entre 15 y 35 años dependiendo del salario. En tanto, no tienen intereses de capital y se actualizan anualmente a través del índice de la construcción o del salario, aplicándose el más bajo de los dos. “Hoy el UVA ajusta por inflación y eso lo hace impagable para muchos”, acotó.

Casas con servicios y espacios públicos

Para el secretario de Hábitat, Diego Leone, más de una vez la disyuntiva fue “hacer viviendas o urbanizar un asentamiento”, y en ese equilibrio movió una gestión que tuvo como mayor logro, según él reconoció, “romper con el concepto de vivienda como obra pública y moverlo a otro paradigma donde para vivir bien la gente no sólo necesita una casa, sino eso, servicios y espacio público”.

Sin embargo, los asentamientos representan uno de los principales desafíos si se tiene en cuenta que hay entre 15 mi y 20 mil familias en esas condiciones. De hecho, sólo en Rosario “se está trabajando sobre 7 mil de esas familias”, recalcó.

Para Leone, son “proyectos a gran escala”, y señaló que sólo en República de Sexta implican una inversión de mil millones de pesos con fondos provinciales sobre 300 familias.

A eso se suman, Sorrento y Cullen con 350 familias; Polledo —conocida como Ciudad Oculta—, La Palmera, el Cordón Ayacucho —ya casi finalizado—, y Villa Banana, además de intervenciones en Los Unidos, Villa Fanta y Barrio Industrial.

Urbanizaciones

Esas urbanizaciones implican también la reubicación de grupos familiares, una situación que en el caso del Cordón Ayacucho ya se hizo en 150 casos y resta otro centenar.

“Después del Rosario Hábitat —el proyecto más ambicioso que tuvo Rosario con financiación internacional—, estas intervenciones están a ese nivel”, recalcó Leone; y, como balance de gestión, agregó la regularización de los de los llamados barrios Fonavi donde se entregaron 10 mil escrituras.

“10 mil familias que terminaron de pagar o pusieron al día sus cuotas, y escrituraron con hipoteca, lo que hace se apropien de la vivienda y el barrio de otro modo”, indicó el funcionario, quien también hizo hincapié en la conformación de los consorcios que son un requisito excluyente para las intervenciones que en estos barrios se llevan adelante a través del Plan Abre.