El traumatólogo Gonzalo Cardozo y el cirujano Rafael Mariano Rico, del Nuevo Sanatorio Berazategui, imputados por "lesiones culposas" tras haber participado de la operación en la que le amputaron una pierna sana a una mujer de 66 años internada por complicaciones derivadas de la diabetes "pueden seguir ejerciendo", dijo la fiscal Karina Santolín.

Los responsables del procedimiento declararán luego de que se realicen los peritajes médicos, mientras tanto depende de la clínica si continúan o no atendiendo. "Por el momento, sino tienen antecedentes penales la pena puede llegar a ser una multa o de 1 mes a tres años de prisión y el tiempo de inhabilitación para ejercer de entre uno y cuatro años", dijo la fiscal en declaraciones a un canal de noticias. "El Código Penal establece que, por lesiones culposas, podría aplicarse una pena de prisión o multa, conjuntamente con la inhabilitación", precisó la fiscal Santolín.

Y detalló: "La pena de prisión puede ir de un mes a tres años. Y la multa se va actualizando. En su momento, por casos similares, se llegaron a aplicar sanciones de entre 10 mil a 15 mil pesos. Después, se podría establecer una inhabilitación de al menos cuatro años para ejercer la medicina"

Además, informó que no mantuvo ningún tipo de contacto con las autoridades del sanatorio y que "no le consta" que en la historia clínica haya un informe realizado por otro sanatorio que exprese que no era necesaria la amputación. "Habría que hacer una junta médica para determinar eso", remarcó. La fiscal contó que el miércoles por la tarde tomó conocimiento, de un modo informal, de la versión que indica que, según los especialistas de la Clínica Ceni de Quilmes (donde Leguizamón está actualmente internada), no era necesario siquiera amputar la pierna derecha porque la infección no representaba semejante gravedad. Así y todo, advirtió que esa alternativa todavía no entró en el marco de lo legal.

"Hasta el momento no me consta esa posibilidad. Eso me lo informó la denunciante (Mayra Rodríguez, hija de la paciente). En el transcurso de la tarde de ayer mantuve una comunicación con ella y vi que salió en los medios hablando de que los médicos de la Clínica Ceni habían dicho eso. Ahora parece que realizarán una junta médica en ese lugar como para establecer esa hipótesis de manera legal", afirmó Santolín.

Según la responsable de la causa, el pedido de declaraciones indagatorias para los dos médicos denunciados se realizará una vez que se obtengan los peritajes del historial clínico de la jubilada y que se reúna el resto de pruebas. "No puedo adelantarme a eso hasta que no tenga conectados todos los elementos de prueba que ameriten esa acción", afirmó.

Santolín indicó, además, que su fiscalía recibió en los últimos años denuncias por mala praxis contra otros médicos del Sanatorio Berazategui, pero que en ninguno de los casos se llegó todavía a una sentencia firme. "Un caso de este tipo nunca me ha tocado. Sí tuve cuestiones de mala praxis, tanto contra este sanatorio como contra otros, pero nunca me tocó algo así", aseguró. En tanto, la hija de la víctima, Mayra Fernández, informó que en el transcurso del día le realizaran a su mamá una arteriografía, un estudio de imagen para conocer el estado de sus arterias.