La fecha, pensada para el 15 de septiembre, aún es una incógnita. Desde la categoría siguen buscando recursos, públicos y privados, para llevar adelante la carrera.

 

A un mes y medio aproximadamente de la fecha estipulada (15 de septiembre) el Callejero santafesino todavía es duda en Santa Fe. A medida que transcurren los días, la incógnita es cada vez más grande. Desde la organización habían puesto como fecha límite, para determinar si se corre o no, primeros días de agosto.

Sin embargo, el día para conocer el desenlace de esta historia podría postergarse. Roberto Mayorana, jefe de prensa del Súper TC 2000 señaló: "Seguimos seguimos trabajando para hacer la carrera". Y enfatizó: "Esa es mi respuesta".

Lo cierto es que aún no se observan movimientos sobre Avenida Alem y 27 de Febrero, arterias de la ciudad que por tres días se convierten en la pista de autos con mayor tecnología del país. No hay trabajos sobre el pavimento, tampoco se observa la colocación de muretes y mucho menos la instalación de luminaria led para la carrera nocturna.

Génesis y cruces

Todo surgió a principios de este mes, cuando el intendente de la ciudad, José Corral informó que en el actual contexto el municipio no estaría en condiciones de desembolsar 60 millones de pesos, fondos necesarios para garantizar el desarrollo del Callejero.

"No queremos dejar deuda", dijo el mandatario local en relación al próximo gobierno municipal que asumirá el 10 de diciembre. Es por eso que le pidió "al gobierno provincial un aporte, como ya lo hizo en Rafaela, en San Jorge, y en Rosario con la construcción incluso del autódromo, para que nos ayude a poder realizarlo".

"Es un año de muchas restricciones económicas, estamos haciendo un gran esfuerzo para poder pagar las paritarias que tiene esta cláusula gatillo y nuestra función es dejar las cuentas ordenadas", sostuvo en ese momento Corral.

La situación obligó a que la organización de la competición inicie conversaciones con los gobiernos local, provincial y también con los privados para confirmar la realización de una de las fechas más importantes que tiene la categoría.

Un día después, el gobernador Lifschitz rechazó de plano lo solicitado por Corral. "Me sorprendió, la verdad es que es un despropósito gastar 60 millones en un evento que dura una noche", dijo Lifschitz.

El que intervino fue también el ministro de Gobierno de la provincia, Pablo Farías. El funcionario, cercano al gobernador, dejó en claro que "la carrera es exclusiva responsabilidad de la Municipalidad, que es la organizadora y tiene trato con la empresa que desarrolla el evento". Y remarcó "que la provincia nunca tuvo ninguna participación en la toma de decisiones sobre si la carrera se hace o no. Si la carrera no se hace, es porque la Municipalidad decide no hacerla o porque no puede hacerla".