Así lo solicitó la fiscalía. El homicidio ocurrió en abril de 2018 en barrio Roma, cuando la víctima intervino en un asalto a una mujer embarazada.

En la mañana de hoy, 30 de octubre, en el subsuelo de los Tribunales santafesinos comenzó el juicio contra el joven de 21 años que el domingo 1 abril del 2018 asesinó a Ariel Martín Castelló, cuando este quiso intervenir en el robo a una joven embarazada en Juan Díaz de Solís al 2500 en barrio Roma.

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La fiscal que investigó el hecho es Cristina Ferraro, quien durante el juicio estará acompañada por su colega Gonzalo Iglesias, solicitará 30 años de prisión para el imputado, es decir, condena perpetua.

Disparó para procurar impunidad

Los ilícitos que investiga la fiscal Ferraro fueron cometidos en la vía pública, el domingo 1 de abril del año pasado en inmediaciones de Juan Díaz de Solís al 2500 en barrio Roma.

“Minutos después de las 15, el imputado intentó apoderarse ilegítimamente de una cartera y una mochila que llevaba una mujer de 30 años que estaba embarazada de ocho meses y que caminaba por el lugar junto a su hermana”, precisó la fiscal. “El imputado circulaba a bordo de una moto, la subió a la vereda –por donde caminaba la víctima–, le apuntó con un pistola 9 milímetros en la zona del abdomen y le dijo: «Mirá lo que tengo para vos»”, agregó Ferraro.

La fiscal del MPA relató que “la víctima comenzó a correr y logró alejarse unos metros del lugar. Inmediatamente después, el imputado intentó escapar a bordo de su moto, pero ello fue impedido por el novio de la víctima y por otro vecino que intentaron retenerlo”.

“Castelló estaba dentro de su casa y escuchó lo que sucedía, motivo por el cual salió de su vivienda y se acercó a colaborar con los dos hombres que tenían retenido al acusado. En ese momento, el joven logró liberar sus manos, sacó de entre sus ropas el arma de fuego con la que segundos antes había intentado robarle a la mujer embarazada y le disparó intencionalmente a Castelló”, explicó la fiscal. “No hay dudas de que la voluntad del acusado –y en ese sentido dirigió sus acciones– fue darle muerte a Castelló para lograr liberarse de la retención de los vecinos, escapar del lugar y procurar su impunidad”, sostuvo Ferraro.

La fiscal del MPA concluyó que “Castelló recibió un disparo de arma de fuego en la zona abdominal. Por tal motivo, fue trasladado al hospital Cullen, donde las heridas que le produjo el impacto de bala le provocaron la muerte minutos más tarde mientras estaba siendo intervenido quirúrgicamente”.

Acusación alternativa

Ferraro remarcó: “Contamos con elementos más que suficientes para tener por debidamente fundada la acusación y su respectiva calificación”. No obstante, la funcionaria del MPA agregó que “en caso que, eventualmente, no puede acreditarse la conexión subjetiva que fundamenta la agravante del homicidio criminis causae, formulamos una acusación alternativa por la autoría del delito de homicidio en ocasión de robo, agravado por el empleo de arma de fuego”, precisó Ferraro.

La fiscal indicó que “la pena solicitada para esta acusación alternativa es de 30 años de prisión”.

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Querellantes

Anabela María Verónica Geist y Lucía María Ruscitti, viuda y madre de la víctima respectivamente, se constituyeron como querellantes en el proceso. Las dos mujeres son representadas por los abogados Federico Lombardi y Agustín Roubineau, pertenecientes a la Oficina de Asistencia a la Víctima del Centro de Asistencia Judicial.