Después de casi un año en obras, el gimnasio de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) recuperó su pileta climatizada. Para estar a tono con los tiempos que corren, el natatorio incorporó nuevos sistemas de calefacción que permiten un importante ahorro de energía. En pocas horas, se agotaron los cupos para las clases de natación.
La pileta de Moreno al 400 recibe a diario a los alumnos, graduados, docentes y no docentes de la universidad pública, pero también a vecinos de la zona que utilizan el complejo deportivo. "Es un servicio muy demandado", explica el encargado del área de Educación Física de la UNR, Sebastián Palomeque.
Las instalaciones del natatorio empezaron a refaccionarse en agosto del año pasado. En medio de esos trabajos, Litoral Gas dispuso el corte del servicio, lo que obligó al cierre de la pileta. Recién después de varias inspecciones y la autorización de nuevas etapas de obra, la concesionaria del servicio habilitó el gas definitivamente la semana pasada.