Tras dos meses sin lluvia útiles, las expectativas de rendimiento se han recortado considerablemente. Hubo entusiasmo por las bajas temperaturas que ayudaron al macollaje, pero ahora la cosecha perdería kilos y calidad.

Los trigos en el norte se Santa Fe acusan el impacto de la sequía y las elevadas temperaturas, por lo que ya se esperan fuertes recortes tanto en los rendimientos como en la calidad del grano.

Tanto en el Este como en el Oeste de la región se consideran los lotes en estado de sequía. Desde Reconquista, el Ingeniero agrónomo Claudio Zorzón compartió un diagnóstico negativo. Afirmó que el cereal está muy complicado por la falta de agua: “tuvimos dos o tres lluvias de 30 o 40 milímetros en todo el ciclo y nada más”. Si bien se intercalaron algunas lloviznas, “no sirvieron para nada”.

El técnico comentó que bajo su asesoramiento cuenta con cultivares de ciclos largos y cortos, por lo que “tengo trigos que están terminando de llenar el grano y otros floreciendo”, relató. Por lo tanto observó impactos de “todos los matices”, siendo “los más tempranos son los más complicados, los más tardíos tienen un poco más de tiempo para llena, pero los primeros están feos”.

También lamentó no haber podido aprovechar el beneficio de las bajas temperaturas que “les vinieron bien a los trigos porque pudieron macollar”. Incluso se habían entusiasmado con superar los habituales 2.600 kilos por hectárea para llegar hasta 3.000. Pero todo cambió tras dos meses sin precipitaciones útiles que durante “toda la etapa reproductiva” del cereal le propinaron “condiciones secas bastante extremas”.

Ahora, la expectativa de rindes se ubica “entre 1.500 y 2.000 kilos; pero probablemente baje más todavía”. Eso sin tener en cuenta los intensos calores, que el fin de semana superaron los 35°C y hoy habrían superado los 40°C. “Los granos van a tener descuentos por mala calidad a raíz de la temperatura”, agregó. “O sea, tenemos el combo perfecto”, dijo, y lamentó que “es un año malo para el trigo; en todo el norte viene muy mal”.

Los pronósticos climáticos son -por ahora- “bastante tristes” porque anticipa lluvias insuficientes para las próximas horas, que no superarían los 20 milímetros, que podría aprovechar escasamente los cultivares más tardíos. Para colmo, sin que las temperaturas bajen de 35/36°C. “No es para nada alentador”.