Un informe del Sideat indica que en mayo se dispararon los siniestros sin lesionados por la presencia de baches. La suba fue del 2.500 por ciento.

El Sistema Integrado de Denuncias de Accidentes de Tránsito (Sideat) mostró la evolución de los siniestros viales, sin lesionados, que hubo en Rosario durante los primeros siete meses del año. De enero a julio, se registraron 442 colisiones causadas solamente por los pozos que hay en las calles. El pico se dio en mayo cuando hubo 155 casos (una suba del 2.500 por ciento respecto del mes anterior) y desde entonces no bajan de 100 por mes. Las cifras hablan por sí solas sobre el deterioro del pavimento en la ciudad.

Mal estado de las calles

El mal estado de las calles ya no es noticia. La cantidad de pozos no sólo provoca la rotura de los automóviles, sino que el Sideat demuestra que es causa de colisiones. La Capital lo refleja diariamente en la sección Opinión, donde se publican las fotos de los baches que los lectores encuentran en las calles de los barrios de Rosario.

Basta con dar un corto paseo para comprobar que no hay arteria sin grandes o pequeños pozos que provocan que los autos deban desviarse y esto cause, con frecuencia, más de un choque.

"El estado del pavimento es fundamental para la seguridad vial", subrayó el experto en el tema, Osvaldo Aymo más que preocupado por la situación de las calles de la ciduad (ver aparte).

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A modo de ejemplo, en plena calle Santa Fe, entre Sarmiento y San Martín, donde circulan varias líneas de colectivos, hay una gran depresión en el medio de la calle. Allí se pone a prueba la agilidad de los choferes de ómnibus que, además de estar atentos a todo lo que sucede abajo y arriba del colectivo, deben esquivar los baches con el consiguiente zarandeo de los pasajeros.

Y si esto sucede en el centro de la ciudad, en los barrios la situación es aún más grave.

"En el ingreso a Santa Lucía, en zona oeste, la calle principal por donde entra el colectivo y la mayoría de los vehículos, hace meses que hay un pozo que, día a día, fue agrandándose y, por lo tanto, se hace cada vez más complicado esquivarlo", expresó una vecina de ese barrio.

En el recorrido que el 115 realiza por el barrio 7 de Septiembre, los choferes deben hacer malabares para transitar por las calles deformadas por las grandes hondonadas.

Según el Sideat, teniendo en cuenta los valores de 2019, en Rosario, las calzadas con pozos generan más accidentes que las calles mojadas. De modo que el mal estado de las arterias es un factor de riesgo mayor que el clima.

En tanto, la página web de la Municipalidad señala que para este año se pavimentarán 139 cuadras, gracias a un acuerdo con la provincia, que permitirá disponer de una multimillonaria inversión "para iniciar obras de pavimento definitivo en cinco barrios de la ciudad, entre otras cuestiones. El plan de pavimento definitivo permitirá avanzar en la eliminación de zanjas y la ejecución de infraestructura hidráulica y cordón cuneta".

Reclamos

La concejala de Juntos por el Cambio, Renata Ghilotti, hizo público su malestar y, ante la cantidad de accidentes provocados sólo por los pozos que hay en las calles, manifestó: "Es imposible no pensar que este crecimiento desmedido esté relacionado con una falta de mantenimiento en las tareas de reparación y bacheo".

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En este marco, la edila recordó que el lunes pasado la Municipalidad anunció una reducción del 30 por ciento en las contrataciones a las distintas cooperativas de trabajo afectadas al bacheo, zanjeo, tareas hidráulicas y de infraestructura urbana. Según argumentaron, debido a la crisis macroeconómica. Ante las cifras de los siniestros, Ghilotti apuntó que "no se debería ajustar y reducir el trabajo de repavimentación y bacheo en la ciudad".

Otros números

La mayoría de los accidentes sin lesionados se produjo entre autos. Comparando sólo el mes de julio de este año, el 80,3 por ciento de los siniestros fue con estos vehículos, el 2,1 por ciento en camiones, en camionetas llegó al 13,8 por ciento, y en motos el porcentaje fue del 2,9.

El análisis, según la franja horaria de los siniestros, muestra que en julio de este año, la mayoría de los choques fueron de 11 a 13, llegando al 16,5 por ciento; y le siguió el horario de las 17 a las 19, que fue del 15 por ciento.