Hace algunos meses en la escena tecnológica se desató una fuerte polémica por prácticas que grandes compañías del sector llevaron a cabo con sus asistentes virtuales, entre ellas Apple y su sistema Siri. Numerosos reportes señalaron que diferentes empresas espiaron indebidamente las conversaciones de los usuarios, pisoteando los pretendidos niveles de privacidad.

¿Qué hicieron, en concreto? En muchos casos almacenaron los pedidos que las personas realizan con sus voces. Además, contrataron empleados para que transcriban dichas interacciones. Algunos de ellos contaron que en ocasiones accedían a situaciones privadas, por ejemplo discusiones de pareja, audios en medio de consultas médicas, situaciones sexuales, etcétera.

Si bien la indiscreción se justificó con la necesidad de grabar para mejorar la eficiencia del software (además señalaron que conservaban sólo el 1% de las charlas), el problema es que esas acciones no eran informadas en forma clara. Además, el hecho de que hayan realizado transcripciones con contratistas externos (empleados no formales) empeoró el panorama.

Después del revuelo, las firmas involucradas (Google, Amazon, Microsoft y Facebook, además de Apple) a su modo iniciaron el camino de rectificación. El caso de la empresa de la manzana mordida es, acaso, el más elocuente. Y ahora confirmó que la grabación será opcional en Siri.

¡Siri, no me grabes!

Según informa TechCrunch, la última beta de iOS 13.2 permite que los usuarios elijan si el asistente Siri puede grabar las solicitudes que ellos realizan. Se espera que el lanzamiento general ocurra pronto.

Esta movida es coherente con el reciente pedido de disculpas público de Apple, una compañía que, más allá de este tipo de deslices, históricamente se jactó de la privacidad y seguridad de sus productos y servicios.

"Sabemos que los clientes tuvieron dudas debido a noticias recientes sobre personas que escuchaban las grabaciones de audio de Siri como parte de nuestro proceso de evaluación de la calidad de Siri. Atendiendo a sus dudas, suspendimos de inmediato la evaluación por parte de humanos de las peticiones a Siri e iniciamos una profunda revisión de nuestras prácticas y políticas. Como resultado, decidimos hacer algunos cambios”, indicaron en un comunicado oficial.

Sabemos que los clientes tuvieron dudas debido a noticias recientes sobre personas que escuchaban las grabaciones de audio de Siri como parte de nuestro proceso de evaluación de la calidad", reconocieron desde Apple.

Si bien insistieron que las escuchas ayudan a mejorar al asistente, que usa los audios como “entrenamiento”, aseguraron que no usan los datos para comercial o crear perfiles específicos. Pero más allá de las excusas, Apple reconoció: “No estuvimos totalmente a la altura de nuestros ideales, pedimos disculpas por ello”. En ese marco, detuvieron el programa de escuchas y lo dejaron en stand by.

Ahora se confirma que iOS incluirá la opción (clara a los ojos de los usuarios) para que Siri no los grabe, si así no lo desean. Además, tal como prometieron, en caso que la práctica sea consentida, los audios sólo serán escuchados por empleados directos de Apple.