En muchos lugares, esta enfermedad no fue estudiada. Ante este panorama, Organismos dedicados a la salud realizarán una investigación para saber exactamente cuántas personas mayores de 25 años padecen la apnea obstructiva del sueño (AOS), informó hoy la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR).

A nivel mundial, diferentes estudios estiman que entre tres y seis de cada 10 adultos sufren AOS, una enfermedad que puede causar deterioro de la calidad de vida, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares, accidentes de tráfico y laborales.

Los estudios internacionales permiten conocer que quienes tienen mayor tendencia a padecer AOS son los hombres, los individuos con sobrepeso u obesidad, los hipertensos (sobre todo los severos), con trastornos cardiovasculares y diabéticos. En el caso de las mujeres, el riesgo de tener apnea aumenta luego de la menopausia.

Cómo será el estudio

La encuesta, que será voluntaria y se realizará en las ciudades Córdoba, Rosario, Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, comenzará en noviembre y se hará de manera conjunta entre el Ministerio de Salud y Desarrollo Social y la AAMR.

Para la investigación se realizarán 3 mil encuestas que serán analizadas para tener el total de los datos a mediados del año que viene.

El especialista en clínica médica y neumonólogo Daniel Schönfedl, ex presidente de la AAMR, explicó que la AOS es una enfermedad que se produce por la vía aérea superior no sólo en gente con sobrepeso, sino también en gente delgada, chicos y adultos.

"No hay cifras sobre la apnea porque recién en la última parte del siglo pasado y principios de éste se le está dando importancia", indicó el especialista, quien recordó: "hace muchos años en facultad no se enseñaba".

Indicó, ademas, que la apnea es un problema de salud pública y hay que tomar políticas sanitarias, y agregó: "el objetivo de la investigación es saber sobre las consecuencias que tiene la enfermedad en la población y tomar medidas para difundir la enfermedad".

Schönfeld precisó que el estudio se realizará en dos etapas: "La primera será a través encuestas para saber la posibilidad que tiene la persona de padecer esta patología".

En la segunda etapa se llevará a cabo un registro de sueño. "Será a través de una poligrafía respiratoria domiciliaria para saber las presunciones que indicaron las encuestas", sostuvo.