El embrión, de avanzado desarrollo, conservaba su placenta y cordón umbilical. Tenía un cable que le rodeaba el cuello.

 

Trabajadores del sector donde se depositan los residuos de la recolección domiciliaria en el complejo ambiental, ubicado en el extremo noroeste de la ciudad de Rafaela, encontraron el cuerpo sin vida en la tarde de este martes. Y se presume que, por el lugar donde fue localizado, pudo provenir de uno de los barrios del noreste del casco urbano.

De inmediato avisaron a la Policía. Una vez constatada la veracidad del hecho, se iniciaron las actuaciones de rigor y lo puso en conocimiento del Ministerio Público de la Acusación.

Más tarde, llegaron al sitio agentes de la Policía Científica y de la Agrupación Bomberos Zapadores quienes, mediante la utilización de la morguera, fueron los encargados de retirar el cuerpo de entre la basura para trasladarlo y se puedan realizarse las pericias correspondientes.

A pesar del hermetismo, se pudo conocer que el el feto estaba completamente formado, y acompañado de una placenta y cordón umbilical y un cable en el cuello, presuntamente de un auricular de teléfono celular.

El caso quedó en manos de la fiscal de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual (GeFaS), Ángela Capitanio, quien dispuso que la División Trata de Personas se haga cargo de la investigación. Hasta el momento no se tienen precisiones sobre el tiempo de vida, o gestación del cuerpo.