Los entornos de realidad virtual recrean imágenes y sonidos con gran fidelidad. Pero hay uno de los cinco sentidos que quedó relegado: el tacto. Esa lógica cambiaría si se divulgase un ingenio desarrollado por investigadores de la Universidad de Northwestern, de Estados Unidos, y de la Universidad Politécnica de Hong Kong.

Ellos crearon una piel artificial, que además funciona en forma inalámbrica y es capaz de percibir estímulos, imitando al órgano más extenso del cuerpo humano. Esa capacidad convierte al material en un complemento ideal para las tecnologías de RV. ¿No sería encantador que, además de poder ver y oír, los usuarios puedan “tocar” objetos virtuales?

Tal como notan en un artículo publicado en la revista Nature, se trata de un material con múltiples capaz que incorpora un chip, sensores y actuadores que sirven para que el usuario sienta vibraciones. Cabe señalar que el ingenio es inalámbrico y que no requiere baterías. De hecho, se carga en vía wireless tal como lo hacen algunos smartphones.

Piel artificial: las posibles aplicaciones

Cuando oímos referencias a la realidad virtual, es usual pensar en juegos. Y esta innovación de la ciencia ofrecería interesantes usos en ese terreno. Por ejemplo, la capacidad de sentir objetos dentro de los videogames, o la interacción con otros jugadores. Sin embargo, esa tecnología trasciende, por mucho, a los videogames y otros usos lúdicos. Al respecto, el material sensible ahora presentado abriría una nueva era en la comunicación física a distancia.

Según notan en Technology Review, un padre podría acariciar a su hijo durante una videollamada, comunicándose desde miles de kilómetros de distancia.

“En la industria de la tecnología se habló mucho acerca del fracaso de la realidad virtual en sus intentos de alcanzar un potencial máximo. Quizás agregar al sentido del tacto podría ayudar”, concluye la fuente.