Tras varios idas y vueltas, Mauricio Macri decidió no derogar el protocolo nacional para el aborto no punible y de esta forma sostendrá a Adolfo Rubinstein como secretario de Salud de la Nación.

El miércoles la Secretaría de Salud publicó en el Boletín Oficial la actualización del protocolo de aborto no punible, una iniciativa que generó criticas internas y un temblor que colocó en la mira a Rubinstein.

La resolución renovaba el protocolo de 2015 y remarcaba que el aborto no es delito en la Argentina cuando existen motivos de salud ni cuando el embarazo es producto de una violación. El texto aclaraba que la voluntad de la víctima debe primar sobre las decisiones de los padres o el personal de salud de un hospital.

Lee también Aborto no punible: la resolución dividió a Cambiemos

"Entre los 13 y 16 años las personas adolescentes pueden dar su consentimiento autónomamente para las prácticas de la interrupción legal del embarazo (ILE), cuando esta práctica no implique un riesgo grave para su salud o su vida", indica la actualización.

En la Casa Rosada acusaron al funcionario de no consultar con nadie la resolución y pidieron la renuncia del funcionario. La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, fue una de las impulsoras de su apartamiento. La versión, hasta la mañana del jueves, es que el Presidente tenía decidido derogar la medida y remover al secretario de Salud, pero, por el momento, nada de esto ocurrió, según indica el portal TN.

El radicalismo expresó públicamente su apoyo para con el funcionario. “Mi solidaridad, apoyo y afecto a @RubinsteinOk, un funcionario ejemplar, un lujo de la salud pública. Como tantos radicales a lo largo y ancho del país, nos sentimos orgullosos de su gestión”, escribió Ernesto Sanz en su cuenta de Twitter.