El proyecto estipula que los efectivos acusados por violencia familiar o de género dejen su arma reglamentaria en la repartición al finalizar su jornada laboral.

Según el informe de la Correpi (Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional )del año 2018, uno de cada cinco femicidios son cometidos por personal de las fuerzas de seguridad y con el arma reglamentaria. Así lo indicó a El Litoral la diputada provincial Verónica Benas (FPCS), quien, además, explicó que presentó un proyecto para prohibirles a los efectivos de las fuerzas armadas de Santa Fe denunciados por violencia familiar o de género llevar el arma reglamentaria cuando están de franco y que el proyecto obtuvo este miércoles media sanción en la Cámara Baja.

En tal sentido, la legisladora aclaró que la idea de esta ley es “resguardar la integridad física, moral, psicológica de los denunciantes, sea la mujer o la familia, de modo de que un sujeto que ya tiene denuncias concretas radicadas en sede judicial respecto de violencia no tenga la posibilidad, como sí la tiene ahora, de, terminada su jornada de servicio en la repartición en la que trabaja, de llevar esa arma del Estado a la casa y con esa arma cometer esos delitos”.

 

“El arma quedaría en la repartición, la policía no tiene la obligación de estar todo el tiempo con el arma reglamentaria, sí cuando está en servicio”, explicó Benas y recordó que en las últimas semanas se conoció el caso de un Comisario del Comando Radioeléctrico de Fray Luis Beltrán que violó a su exnovia y “amenazó de muerte a ella y a la familia con el rango y el arma reglamentaria”.