Como cada año, esta fecha aniversario nos invita a reflexionar sobre nuestro pasado; a rescatar de la historia esos momentos y esos nombres que modelaron nuestra comunidad. Pero no deberíamos hacerlo únicamente desde la curiosidad que nos puede despertar determinados datos anecdóticos de lo que fuimos; sino que esa revisión debería servirnos para entender nuestro presente y, fundamentalmente, darnos herramientas útiles y valederas para afrontar los desafíos del futuro.
Conocer el majestuoso emprendimiento encarado por nuestro fundador Don Manuel Ocampo Samanés; el que no sólo estampó el nombre “Villa Ocampo” en la geografía nacional, sino que fue un verdadero ejemplo de progreso en las inhóspitas tierras del Chaco Austral, habiendo desarrollado en menos de 15 años todo un complejo basado en la agricultura, la industria y los medios de comunicación más avanzados de la época, donde no había más que monte habitado por pueblos originarios.
Conocer el impulso agroindustrial que años después le brindara al pueblo Don Francisco Conti, recuperando el espíritu emprendedor de la comunidad; siendo él mismo ejemplo de compromiso y trabajo social, participando en diversas instituciones intermedias y hasta en la conducción comunal.