Fortnite: Battle Royale sigue siendo el videojuego de moda, más allá de los competidores que procuraron robarle la corona que ostenta. El título de supervivencia debutó para PC y consolas en 2017, y al año siguiente llegó a móviles. Pero su vínculo con el gran caudal de smartphones y tablets es particular: Fortnite no se consigue en la tienda de apps para Android, sino en una plataforma de Epic Games, desarrollador del juego.

Esta semana nos enteramos que las partes involucradas intentaron alcanzar un acuerdo para ofrecer el battle royale directamente en Google Play. Sin embargo, las negociaciones no llegaron a buen puerto.

¿Cómo se explica el cortocircuito entre el creador de Fortnite y la empresa de Mountain View?

Fortnite lejos de Google Play

Cuando la popular entrega se lanzó para móviles, Epic Games se rehusó a pagar el 30% de regalías que exige Google a las propuestas disponibles en su tienda, que recibe por cada transacción dentro de las apps. El desarrollador intentó negociar con el gigante estadounidense para que su producto extienda su pisada en Android, el sistema operativo que domina la escena móvil con más del 80% de participación a nivel mundial. Pero Google no modificó sus condiciones.

Creemos que esta forma de vincular un servicio de pago obligatorio con una tarifa del 30% es ilegal en el caso de una plataforma de distribución con más del 50% de cuota de mercado”, notaron desde Epic Games.
En ese sentido, Epic Games pretendía que el patrón de Android acepte una modalidad especial de pagos. Cabe recordar que en Fortnite se emplea una moneda virtual denominada “PaVos”, que se usa para abonar microtransacciones, por ejemplo para comprar skins o emotes (los famosos bailecitos del juego).

Pero esa mecánica va en contra de la política impuesta por Google, que exige a los desarrolladores que los pagos sean gestionados por su plataforma. Sin excepciones.

“Google Play tiene un modelo de negocio y una política de facturación que nos permite invertir en nuestra plataforma y herramientas para ayudar a los desarrolladores a construir negocios exitosos y mantener a los usuarios seguros”, señalaron desde Google en declaraciones a The Verge.

Y agregaron, para explicar que no Epic Games no recibirá un trato especial: “Damos la bienvenida cualquier desarrollador que reconozca el valor de Google Play y esperamos que participe en los mismos términos que otros desarrolladores”.

Por su parte, desde la compañía que desarrolla el juego comentaron que no esperan una excepción especial sino un cambio general en estas políticas. “Creemos que esta forma de vincular un servicio de pago obligatorio con una tarifa del 30% es ilegal en el caso de una plataforma de distribución con más del 50% de cuota de mercado”, notaron.

Tal como recuerda la fuente mencionada, Fortnite sí está disponible en la tienda de Apple. Mientras tanto, los usuarios de equipos con Android deberán descargar el juego por fuera de la tienda oficial.