El sábado se conoció que siete niños fueron atacados por palometas en las playas de la ciudad de Santa Fe. Se trata de Los Espigones I y II.
Desde el Municipio habían advertido que estas playas eran sólo para uso como solarium y que sus aguas no estaban habilitadas para darse baños. Pero de igual modo, muchas personas optan por sumergirse sin tener en cuenta las consecuencias.
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Afortunadamente los menores atendidos no revisten gravedad.