Luciana Salazar presentó en octubre un escrito para que la Justicia la investigue por lavado de activos, y pidió que citen a declarar a Cinthia Fernández y a Carla Czudnowsky, por sus dichos en televisión respecto a los tuits políticos de la rubia y un supuesto dinero que recibiría por ello.

En medio de su pelea con Cinthia por Martín Baclini, la conductora anunció que iba a demandar a la panelista de Los Ángeles de la Mañana (El Trece), luego de que dijera que ella "cobra, copia y pega”, haciendo referencia a sus publicaciones en Twitter. Y contra Carla Czudnowsky, quien en Bendita (El Nueve), hizo alusión a que cobraría por la publicación de algunos de sus tuits.

Según el escrito presentado ante el juez Rodolfo Canicoba Corral, Luciana sostiene que ambas panelistas "sembraron sospechas respecto a quien suscribe recibiría dinero de todos los argentinos de parte de funcionarios políticos que administran ese dinero". "Suponer que utilizo dinero de todos los argentinos de forma ilegal hace que quienes pretenden contratarme dejen de hacerlo al tener la sospecha que soy una persona que realiza actos de corrupción al recibir dinero del erario público sin declarar, para publicar determinados temas en mis redes sociales”, rezaba la presentación.

Mercedes Ninci contó en Radio Mitre que la fiscal Paloma Ochoa solicitó a Canicoba Corral se declare incompetente en la autodenuncia que realizó Luciana. Ochoa consideró que la denuncia no debe ser investigada en el fuero Federal por considerar que “los acontecimientos que se exponen en una denuncia penal deben ser concretos” a la vez que agregó que “Cinthia Fernández y Carla Czudnowsky no señalaron como autora de un delito a Salazar, por lo que el pedido de que sean citadas a brindar explicaciones en este fuero, no resulta conducente”.

Para la fiscal, en los dichos de ambas panelistas "no existe elemento que permita sostener que aquel dinero supuestamente recibido por Salazar tuviera como fuente fondos de carácter público y/o participación de funcionarios públicos".