Con Maximiliano Pullaro como claro favorito para la Gobernación, la candidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, viajó temprano a Rosario para participar de los festejos que, espera, revitalicen su campaña nacional.
Casi 2.900.000 santafesinos definieron este domingo, con su voto, quién será el próximo gobernador de la provincia. El resultado quedó casi puesto después de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (Paso) por la amplia ventaja que Unidos para Cambiar Santa Fe le sacó a Juntos Avancemos. El radical Maximiliano Pullaro quedó a las puertas de la Casa Gris aunque los partidos hay que jugarlos y el peronista Marcelo Lewandowski va por la remontada.
Pullaro, ex ministro de Seguridad de la gestión del fallecido Miguel Lifschitz, construyó su candidatura con tiempo y se fortaleció en las Paso en las que venció a Carolina Losada y la socialista Mónica Fein.
Lewandowski, en cambio, tomó la decisión de competir a horas del cierre de listas y después de que el gobernador Omar Perotti sostuviera hasta último momento al que era su preferido, el diputado nacional Roberto Mirabella.
Todo condujo a una realidad en la que el peronismo santafesino quedó sumido tras las Paso y que se puede profundizar si se repite este domingo en las generales: falta de liderazgos claros, internas, descoordinación, carencia de una estrategia común.