"La decisión de cerrar las oficinas de X en Brasil fue difícil", dijo Musk. "Si hubiéramos aceptado la censura secreta (ilegal) de Alexandre de Moraes y sus exigencias de transferir información privada, no habríamos podido explicar nuestras acciones sin vergüenza", agregó.
En los últimos años, De Moraes ordenó el bloqueo de cuentas de figuras influyentes de los movimientos ultraconservadores brasileños, fundamentalmente desde los intentos de los partidarios del expresidente Jair Bolsonaro, admirador de Musk, de desacreditar el sistema de votación electrónica durante las elecciones presidenciales ganadas por Luiz Inácio Lula da Silva.
En abril, X admitió que los usuarios de varias cuentas bloqueadas habían logrado eludir las restricciones. "A pesar de nuestras numerosas apelaciones no escuchadas ante la Corte Suprema, un público brasileño desinformado sobre estos fallos y el hecho de que nuestro personal brasileño no tiene responsabilidad ni control sobre el contenido bloqueado en nuestra plataforma", el juez De Moraes "decidió amenazar a nuestro personal en Brasil en lugar de respetar la ley y sus procedimientos", afirmó el sábado la red social.