Antes del mediodía de este viernes, una mujer se prendió fuego en una iglesia ubicada en Zelarrayán al 700, en Bahía Blanca. 

"Yo entré a rezar. No había nadie, sólo una persona. Estaba rezando y se empezaron a escuchar gritos, entonces salió ella, al costado del altar, prendida fuego y gritando", contó Stella Maris, la única persona presente en el templo al momento de la drástica decisión de María Esther Cagiao.

La mujer permanece en el área de Terapia Intensiva del Hospital Municipal, en grave estado.

La mujer tomó la fatídica decisión de prenderse fuego este mediodía en el interior de la Parroquia Inmaculado Corazón de María.

De acuerdo a las informaciones, la mujer tuvo que ser trasladada al Hospital Municipal, en código rojo por las graves quemaduras sufridas en su cuerpo.

Una testigo ocasional en el templo, la única presente en ese momento, fue la primera en asistir a la damnificada y contó lo sucedido.

Según la testigo, de nombre Stella Maris, la mujer habría tomado la drástica decisión tras haber sido desalojada de la pensión donde alquilaba en Soler al 600.

Otras fuentes consultadas indicaron que la víctima, mientras estaba siendo asistida de las graves lesiones, contó que le habían entrado a robar a su casa y esto derivó en que "la dejaran en la calle".

"Ella me dijo llamame a ese número, en un papelito que tenía con un teléfono. Yo avisé primero al 911 para avisar esto y después cuando me preguntaron como fue, saqué ese papel y se lo di a un muchacho que trabaja acá en el Claret y ahí sí comprobó que es verdad lo que decía la señora".

De acuerdo a la mujer, la damnificada repitió que "no quería vivir más" por lo ocurrido con su vivienda, mientras era auxiliada por los vecinos en la zona de acceso al templo.

"Estaba toda prendida fuego pobrecita, yo no sabía como hacer porque estaba sola", cerró.